En Estancia Tama son especialistas en lechería y no paran de crecer

Con un millar de vacas en producción proyectadas para este año y un ordeñe estacional que arranca en 18.000 litros y termina por arriba de los 30.000, la explotación lechera de Estancia Tama consolida su posición entre los mejores establecimientos entrerrianos. Y lo hacen desde el campo ubicado en las inmediaciones de la localidad de Camps, adonde la familia Vila Moret fue a trabajar en 1987 en rubros generales del agro hasta que en 2005 se focalizaron en lechería y se hicieron expertos en la materia.

“Arrancamos con pocas vacas hasta que fuimos creciendo, por un amigo de mi padre entramos al rubro y no lo dejamos más” dijo Félix Vila More. Precisó que por estos días cuentan don dos tambos para atender a 735 vacas en ordeñe y para el final del año esperan llegar al millar planificado.

A la preciada materia prima la obtienen del rodeo Holstein, reconocibles desde lejos por su elegancia, andar y sus marcas distintivas en blanco y negro. El productor precisó que la raza es ideal para la zona, chica, caminadora, fértil y de buena ubre. “Acá trabajamos para potenciar sus cualidades” sentenció antes de aportar que el manejo reproductivo es con servicio de mayo a diciembre y que el año pasado empezaron con inseminación a tiempo fijo. Los resultados están a la vista ya que los índices de preñez son del 80%.

Para el experto, el bienestar animal es una premisa. En los últimos 70 años el régimen de lluvias no hace más que aumentar y el barro que genera atenta contra la raza y multiplica el riesgo de enfermedades, de manera que la opción fue mejorar el confort de la tropa a partir de nuevas instalaciones. Incluso, a la asistencia general de médicos veterinarios sumaron especialistas en patologías como la mastitis y la gama que ataca las patas de las vacas. “Capacitamos al personal, sumamos protocolos y hacemos todos los controles necesarios para tenerlas saludables” describió Vila Moret, entusiasmado al abordar aspectos productivos del establecimiento.

Ponderó que el manejo nutricional es un factor esencial, razón por la cual también cuentan con la asistencia constante de especialistas de la firma Daser Agro para cada área del tambo. “Le damos importancia a todo, incluida la recría. Estamos conformes con el resultado” definió el productor.

En ese modelo cuajan las siembras que concretan en la Estancia. Hacen maíz para consumo propio y la soja que suele terminar comercializada en forma de canje a cambio de expeller.

Carlos Ricciardi, de Daser Agro, aportó que ya no se habla de productos nutricionales determinados, sino que el concepto está ligado a programas o tecnologías bien definidas. “Apuntamos a la practicidad del manejo para producir más y mejor en cualquier campo y eso se da desde la guachera”.

La propuesta es lograr que los animales absorban la mayor cantidad de energía, en particular para sobre llevar los días de invierno, el principal cuello de botella. Contó incluso que cuentan con un programa de Cargill para que la vaca llegue antes al tambo, que transite su recría con ganancias de peso estables y sin complicaciones.

Por el andarivel de los factores externos, Vila Moret ponderó que, como a todo el sector, los afecta el costo de los granos y el atraso en el valor de la leche. Sin embargo, eligió declarar: “Hay que concentrarse en lo que depende de nosotros, en los productivo, a lo demás no lo podemos controlar”.

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