Mantuvo una intensa agenda de trabajo con altas autoridades de ese país con miras a fomentar la cooperación bilateral en materia agropecuaria, a través de la transferencia de conocimientos, métodos de siembra directa, genética y tecnología.
El objetivo de ambas naciones, que tienen vínculos históricos, es promover una mayor producción de alimentos en Cuba, que contribuya a fortalecer la soberanía alimentaria y la sustitución de importaciones de la isla, a la vez que se abren oportunidades para empresas argentinas en el mercado cubano.
Neme visitó el Instituto de Investigaciones de Granos y las principales empresas dedicadas a la actividad agropecuaria, acompañado por el embajador argentino, Luis Ilarregui, y a un grupo de empresarios argentinos dedicados a la actividad agropecuaria.
Durante la visita, el Secretario mantuvo reuniones con el canciller Bruno Rodríguez Parrilla, el ministro de Agricultura, Ydael Jesús Pérez Brito, el viceprimer Ministro, Ricardo Cabrisas Ruiz, el ministro de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, el viceministro de Agricultura, Maury Hechavarría, autoridades del Grupo Agrícola y la importadora de alimentos Alimport.
En dichas reuniones, se evaluaron de manera conjunta alternativas para desarrollar proyectos de cooperación técnica y modelos de negocios en diversas zonas agropecuarias en Cuba, que presentan un gran potencial para el cultivo de granos como el maíz, el frijol y la soja, así como para la ganadería, la industria avícola y caprina, la industria láctea y la producción de frutas tropicales como plátano, mango, palta y cítricos.
Asimismo, se avanzó en un esquema que contemple la producción de etanol a partir de la caña de azúcar, lo que permitiría reducir la dependencia de Cuba del petróleo importado. Neme destacó que “la Argentina acompañará a la República de Cuba en su proceso de sustitución de importaciones, a partir del fortalecimiento de las capacidades locales y la dinamización de las cadenas de valor, lo que permitirá mejorar su productividad de manera sostenible y robustecer el abastecimiento de su mercado interno con producción propia”.
A través de empresas y organismos argentinos, incluyendo al Instituto de Tecnología Agropecuaria (INTA), se coordinará la cooperación técnica para identificar las mejores áreas para el desarrollo de cada tipo de producción, y los empresarios agropecuarios argentinos interesados en participar de estos proyectos se coordinarán con sus contrapartes cubanas para diseñar los respectivos modelos de negocios. También, se contempló la posibilidad de trabajar con pequeños productores y transferir el paquete tecnológico argentino ya desarrollado para agricultura familiar, lo que potenciaría su producción.
La reunión con el viceprimer ministro, Ricardo Cabrisas Ruiz, la viceministra de Relaciones Exteriores, Ana Teresita González Fraga y el viceministro de Agricultura; Maury Hechavarría, en el Consejo de Ministros de Estado resultó de gran relevancia para validar la voluntad de avanzar con un trabajo conjunto en el marco del proyecto de desarrollo agropecuario, que se venía conversando con diversas autoridades. Las autoridades cubanas manifestaron que tienen especial interés en concretar estos proyectos y contribuir a alcanzar la soberanía alimentaria.
Al cerrar la gira, Jorge Neme se reunió con el ministro de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, quien le presentó un diagnóstico de la situación agrícola de Cuba. El Secretario de Relaciones Económicas le planteó que la Argentina está en condiciones de ofrecer una estrategia de apoyo al desarrollo agropecuario cubano que atendería especialmente la provisión de maquinaria y tecnología, así como la sustitución de importaciones alimentarias, para lo cual coincidieron en que avanzar en un acuerdo de cooperación bilateral.