Por Agroempresario.com
Rosendo Fraga es abogado, analista político e historiador. Además de haber escrito más de 37 libros y ganado muchos premios tanto nacionales como internacionales, es director del Centro de Estudios Unión para la Nueva Mayoría.
En una entrevista en exclusiva para Agroempresario.com, dialogamos sobre la situación actual entre el Gobierno y el sector agropecuario a raíz del cierre parcial de las exportaciones, las consecuencias en materia de relaciones internacionales y el escenario a pocos días de las elecciones primarias o PASO.
En relación a las medidas de cese de comercialización que está pensando el sector agropecuario, como consecuencia de la dilación a la reapertura de las exportaciones de carne, Fraga considera que es lógico que el agro esté pensando en medidas de protesta. “El cepo a la carne no sólo es una medida perjudicial para el sector, que revela una visión errónea en cuanto a la productividad del campo en el corto plazo, sino que desconoce la importancia como generador de divisas. A eso se agrega la experiencia de la mala relación del sector con el Kirchnerismo, que se instaló en 2008 y que nunca se superó”, sostuvo.
Con respecto al comercio exterior afectado por estas medidas, cree que con el cepo de la carne se ve que el Gobierno no otorga importancia a preservar los mercados. “El incumplimiento de las exportaciones a China -uno de los mercados más promisorios- refuerza la falta de conocimiento sobre algo tan simple como que la continuidad y el cumplimiento de los compromisos es la clave para ampliar mercados y conservarlos. Es sorprendente porque, además, la potencia asiática es de especial relevancia para el gobierno de Alberto Fernández y esta medida deterioró la relación comercial”.
Además de China, considera que el cierre de exportaciones a la carne afectó también la relación con Israel que tiene en Argentina uno de sus principales proveedores de alimentos Kosher. “El reclamo diplomático de este país,- es una relación bilateral importante para Argentina- hizo suspender el cepo para este caso en particular”.
Considera también que el motivo de la medida del Gobierno es combatir la inflación, en el período electoral. Se trata de una medida de dudosa eficacia y de alto costo para las exportaciones del país mirando hacia el futuro.
Cuando le preguntamos hasta cuándo calcula que esta dilación continuará, su respuesta fue contundente: “Es claro que el cepo a la carne continuará por lo menos hasta que finalice el proceso electoral. Los despidos y suspensiones que han tenido lugar en la industria frigorífica, justo días antes de las PASO, no parecen llevar al Gobierno a cambiar la medida aunque ésta genere costo político desde este punto de vista”.
A su vez, recuerda que hace poco tiempo, una gran inversión china en la industria porcina entró en crisis por una toma de posición pública del Presidente respaldando el reclamo vegano. No cree que el resultado de las PASO haga cambiar al Gobierno su postura. “Recién definida la elección podría haber algún cambio, pero en modo alguno certeza sobre ello”, comentó el analista.
Para finalizar, está convencido que hay una fuerte ideología detrás de toda medida del Gobierno y que también se estaría expandiendo hacia el sector industrial: “El prejuicio ideológico y los conflictos dominan la política del oficialismo con el campo. Paradójicamente, algo de esto empezó a suceder con la industria, con las críticas del Gobierno en el día del sector”, cerró.