Por Agroempresario.com
En una entrevista con el presidente de Aapresid (Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa), David Roggero, dialogamos sobre su mirada frente a la competitividad argentina en relación a otros países y sobre las retenciones a las exportaciones.
Roggero participó de forma remota en el lanzamiento de la campaña agrícola 2021/2020 que fue realizado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires junto a otros referentes del sector como Fernando Rivara, presidente de la Federación de Acopiadores de Granos; Raúl Dente, vicepresidente de la Bolsa de Cereales porteña; Alfredo Paseyro, director ejecutivo de la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA); Ernesto Crinigan, presidente del Centro de Corredores y Agentes de la Bolsa de Cereales; Roberto Domenech, presidente del Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA); Juan Eiras, presidente de la Cámara Argentina de Feedlot y Luis Zubizarreta, presidente de la Cadena de la Soja Argentina (Acsoja).
Con respecto a la competitividad, Roggero sostuvo que el productor argentino tiene una alta eficiencia asociada a toda la presión que recibe a nivel impositivo, derechos de exportaciones y retenciones.
“La realidad es que sería deseoso que estos derechos de exportación retenidos al productor fuesen nulos o muchísimos más bajos porque, si bien es cierto que somos competitivos, esa competitividad no es gratuita, es a base de no reponer los nutrientes que nos estamos llevando todos los años de nuestras cosechas”, sostuvo el presidente de Aapresid.
Está convencido de que son oportunidades que todos los productores se están perdiendo a nivel fertilidad de suelo. Además, agregó que el hecho de tener que pagar derechos de exportación o retenciones, “hace que no se pueda vislumbrar inversiones e infraestructura relacionada a mejorar la comercialización de los productos que generamos”.
Para Roggero, de continuar en el camino de generar cada vez mayor presión impositiva y, además, herramientas que atacan el valor de la mercadería que se está generando el productor, seguiremos perdiendo oportunidades como país. “No importa si el negocio y las condiciones climáticas permitieron tener una buena o mala rentabilidad, el Estado es socio siempre. Creemos que es una Nación que no tiene una mirada justa, adecuada y equilibrada sobre sus ciudadanos”, cerró.
