Por Agroempresario.com
La Fundación Bosques Nativos Argentinos para la Biodiversidad es una organización sin fines de lucro, que surgió a partir de la necesidad de generar un puente entre las capacidades científico-técnicas nacionales con las soluciones a las problemáticas ambientales. En una entrevista exclusiva con Agroempresario.com, el doctor Esteban Avigliano (36), director del Centro de Investigaciones Antonia Ramos (CIAR), nos contó cuáles son los objetivos que persigue el organismo y qué clase de actividades realiza para concretarlos.
El mano a mano a continuación.
- ¿Cuáles son los objetivos de la organización?
Tenemos tres propósitos esenciales: promover la regeneración de bosques nativos, alentar la restauración dinámica de la biodiversidad y apoyar las investigaciones científicas argentinas. Estas líneas se unen en la necesidad de generar marcos de conocimiento y gestión ambiental.
Hoy en día, contamos con la ayuda de profesionales especializados en distintas áreas (biodiversidad, ciencias agrarias, forestales, veterinarias y químicas). La red se compone de más de 50 científicos a escala nacional. En un primer momento, el grupo fundador estaba formado por pobladores y productores locales de Misiones.
- ¿Cuáles son las principales problemáticas que hoy en día afectan a los bosques nativos en el país? ¿Podrías hacer un breve resumen región por región?
Son diversos los factores que afectan a los bosques nativos argentinos. En primer lugar, cabe mencionar a la deforestación para hacer un cambio en el uso del suelo. Esto se lleva a cabo mediante la deforestación directa (tala) o la quema de pastizales y bosques para generar superficies aptas para el cultivo o la urbanización. Inclusive, puede ser consecuencia del mal manejo de los sistemas silvopastoriles.
Por otro lado, la deforestación también puede ser motivada por factores económicos ligados a la comercialización indiscriminada de los recursos que brinda el bosque.
La deforestación debida a cambios en el uso del suelo responde a una práctica común en espinales y montes del centro y centro-norte del país, donde buena parte de los bosques fue reemplazada por campos agrícolas ganaderos.
En dicha región, la extracción desmedida de rodales para la fabricación de carbón o durmientes de construcción ha tenido una fuerte contribución en la deforestación. Además, en áreas las áreas boscosas subtropicales, como yungas y selvas paranaenses, las zonas agrícolas se componen de parcelas relativamente pequeñas en comparación a la llanura pampeana o chaqueña. Allí, la extracción de maderas altamente valoradas para la construcción de insumos domésticos ha tenido un importante rol en la disminución de superficies boscosas. Árboles como lapacho, palo rosa, cedro o incienso fueron explotados con escasa regulación, provocando el deterioro del entorno.
En la región patagónica, antiguos bosques han sido talados para generar insumos para la construcción, mientras que sus maderas fueron históricamente usadas para calefaccionar industrias y hogares. En las últimas décadas, los incendios -intencionales o no- vienen representando un riesgo significativo para los remanentes boscosos de la Patagonia, junto con los sistemas silvopastoriles.
- ¿Qué actividades llevan adelante desde el organismo para concretar sus metas?
Realizamos actividades propositivas basadas en el conocimiento científico-tecnológico. Se trata de acciones integrales que tienen como objetivo generar las condiciones para la restauración dinámica de la biodiversidad apoyada en fundamentos científicos y considerando las problemáticas socio-ambientales emergentes.
Las actividades incluyen desde la investigación básica sobre la biodiversidad, que permite generar diagnósticos sobre el estado de deterioro de entornos naturales y actúan en consecuencia, hasta la participación en propuestas de manejo a escala local y nacional.
Debido a que las problemáticas son multifactoriales, nosotros conformamos grupos de trabajo multidisciplinarios y específicos para diferentes proyectos en las diversas regiones de nuestro país, incluyendo a productores y la población local; representantes de ciencias sociales, económicas y biológicas; y gestores.
- ¿Qué clase de trabajos e investigaciones desarrollan desde el CIAR? ¿Cómo fue concebido el centro? ¿Cuántas personas trabajan allí actualmente y en qué áreas profesionales se desempeñan?
El CIAR fue concebido desde la necesidad de generar un puente entre las capacidades científico-técnicas nacionales con las problemáticas socio-ambientales actuales. Desde el centro se realizan y promueven investigaciones asociadas a la restauración de la biodiversidad, contando con una red de más de 50 científicos especializados en distintas disciplinas.
También promueve la investigación de la Selva Paranaense, poniendo a disposición de los investigadores que lo requieran, comodidades para alojarse y realizar diferentes trabajos. Además, cuenta con alojamientos y un laboratorio en plena selva misionera.
Por otra parte, funciona como sitio piloto, donde se ponen a prueba diversos escenarios de producción sustentable, a nivel científico-educativo, como alternativa al uso extractivo del monte. En esta línea, hay parcelas experimentales de frutales nativos, yerba bajo monte, colmenas de abejas y viveros de producción de árboles. A su vez, dispone de un banco de semillas con fines educativos y científicos.
Funciona como centro educativo, brindando cursos de restauración dinámica y apoyando a diferentes universidades y organismos de ciencia, los cuales lo usan como lugar de trabajo para investigaciones de grado, doctorales y posdoctorales.
- ¿Cuáles son las principales características del suelo misionero? ¿En qué medida crees que los recursos hídricos se vinculan con las actividades sociales, económicas y ambientales de la provincia?
Debido a su geografía y sistemas de producción a pequeña o mediana escala, los misioneros están íntimamente vinculados a los recursos hídricos. La provincia, además de estar contenida entre los ríos Paraná, Uruguay e Iguazú, cuenta con infinidad de vertientes y arroyos internos, que son usados por productores locales con fines domésticos, riego y producción de peces.
Misiones dispone de, además, varias áreas naturales internacionalmente conocidas por sus increíbles accidentes geográficos asociados y moldeados por el agua, como las Cataratas del Iguazú, los Saltos de Moconá y Salto Encantado, transformando el recurso hídrico en un elemento cultural importante para la sociedad.
Desde el punto de vista económico-productivo, todas las actividades agrícolas-ganaderas, como la producción de yerba, té, mandioca, etcétera, están vinculadas al agua. Esto sucede incluso en la capital, la cual se sitúa en la cola del embalse de Yacyretá.
- ¿Qué recomendarías para cuidar mejor de bosques, recursos y la biodiversidad circundante?
Los tres principales ejes para cuidar mejor los bosques y la biodiversidad son: educación integral (conocimiento científico, educación ambiental y social), financiamiento para promover acciones relacionadas al uso y la conservación (investigación, producción sustentable y conservación) y políticas ambientales sólidas persistentes en el tiempo.
- ¿Qué campañas de concientización realizaron desde Bosques Argentinos en el último tiempo?
Tal vez, la campaña de concientización permanente y más grande está ligada a la plantación de árboles nativos, que impulsamos desde niveles preescolares hasta universitarios, utilizando todos los medios posibles, como charlas en colegios, universidades, museos, redes sociales e incluso promoviendo canciones para chicos.
Una de las últimas estuvo ligada a los incendios en los bosques patagónicos. Además de trabajar para visibilizar problemáticas, proponemos acciones directas que impactan en el terreno. Por ejemplo, en la Patagonia hemos recaudado fondos para colaborar con los sectores de la sociedad que perdieron sus hogares a causa del fuego y trabajamos en la restauración de los bosques quemados.
- ¿Qué los motiva a trabajar día a día?
Nuestro lema es “Pasión por los Bosques”. Creo que la motivación está en poder contribuir con un granito de arena -una semilla en este caso- para recuperar la biodiversidad y que todos podamos vivir mejor.
- ¿Qué estrategias plantean desde la organización para afrontar la restauración de bosques nativos y la regeneración de la biodiversidad en la Argentina? ¿Cuáles son las provincias más afectadas por la problemática?
Nuestra principal estrategia es restaurar. Trabajamos en la restauración de bosques en la Patagonia, la Llanura Pampeana, los bosques secos de Mendoza, las yungas y la Selva Paranaense.
Estos planes incluyen la búsqueda continua de fondos que permitan ejecutar los proyectos de restauración e investigación y posibiliten conformar equipos de trabajo multidisciplinarios. A la fecha llevamos plantados casi 200 mil árboles nativos.
- ¿Qué hay que hacer para ser voluntario?
Pueden contactarnos a través de cualquiera de nuestras redes sociales: Facebook o Instagram.