Por Agroempresario.com
La subsecretaria de Producción del Ministerio de Producción e Industria de Neuquén brindó una entrevista exclusiva a Agroempresario.com en la que se refirió a las líneas de trabajo de la cartera y a los principales desafíos que enfrentan las distintas producciones de la provincia.
¿Cuáles son los ejes fundamentales de la subsecretaría?
Tengo 5 direcciones a cargo; por un lado, tratamos de trabajar acompañando a todo el sector productivo desde las Buenas Prácticas Agrícolas y Ganaderas, una línea estratégica.
Por otra parte, en el marco del ministerio llevamos adelante acciones concretas para mitigar o estar mejor parados frente a los efectos del cambio climático. También tengo a cargo fruticultura, horticultura, todas las ganaderías (excepto la bovina) y el área de desarrollo rural. Esta última línea de trabajo apunta a mejorar las condiciones de vida de todas las familias rurales para que puedan contar con acceso al agua y a la electrificación, entre otros servicios básicos.
Otra área particular que está en pleno desarrollo es Acuicultura, para ello trabajamos con las Buenas Prácticas y con la modalidad de cadena de valor. El objetivo es fortalecer ese entramado y potenciar la producción con acciones concretas que tienen que ver con asistencia técnica, capacitación y financiamiento.
¿Cómo está formada la matriz productiva de Neuquén?
Por un lado, la matriz productiva a la ganadería con muchísimos productores que se dedican al ganado menor de ganadería mixta (vacas, caprinos y ovinos). Neuquén es una de las principales provincias con cabezas de caprinos. Luego está la fruticultura, actividad que más aporta al producto bruto gracias a la pera y manzana. También acompañamos la producción de cerezas y frutos secos que son muy fuertes. Neuquén no se caracteriza por producir cantidad pero sí calidad diferenciada, en parte por el expertise de su gente pero también por los recursos naturales disponibles que hay.
Otra área que me faltó mencionar y que es muy relevante de la cadena ganadera es la producción forrajera, ahí hemos puesto mucho recurso financiero y capacitación. La lógica de nuestro ministro es que a veces no se necesita sólo dinero sino un acompañamiento desde la capacitación, digestión para generar sinergia y comunicación para que se dé el encuentro del sector privado con el sector público. Estamos convencidos que la rueda la mueve más el sector privado y nosotros como sector público debemos acompañar y sinergizar estas cuestiones.
¿Cuál es la situación actual de las distintas producciones?
La Fruticultura atraviesa una crisis macroeconómica; en este marco, los productores que se han podido tecnificar están mejor parados con un riego adecuado para prevenir heladas o están adheridos al ente compensador de granizo. Se trata de una actividad donde el cambio climático impactó en el sector con importantes heladas. Por suerte contamos con una Ley provincial contra el granizo que nos ayuda a contrarrestar los efectos.
Ahora está impactando mucho el costo de la energía. En este punto, nuestro ministro está trabajando fuertemente porque esto no sólo afecta al sector primario sino a toda la cadena.
En cuanto a sanidad estamos muy bien parados, con un programa de seguimiento de resultados de nuestra principal plaga. Como Gobierno hemos garantizado ese estado sanitario poniendo dinero todos los años.
Los frutos secos están en plena expansión logrando exportar y en la ganadería bovina logramos establecer un Plan Bovino en todos los eslabones de la cadena -desde el forrajero hasta la industria- que estamos llevando adelante.
¿Qué ocurre con la ganadería?
A la ganadería le está yendo bien, por supuesto tenemos que seguir fomentando las Buenas Prácticas para la eficiencia de esa producción. Se producen casi 4 terneros cada 120 vacas, tenemos un amplio margen para seguir trabajando. Estamos poniendo el foco en el cuidado del recurso; el financiamiento que damos se otorga en función a la aplicación de estas prácticas ganaderas, ya que la rentabilidad no se logra sólo por el desarrollo económico sino por la sustentabilidad de los recursos.
También crecimos en ovinos y trabajamos la lana. En este sentido, aumentamos en un 37% la lana de calidad (clasificada), con casi 350 productores adheridos. Estamos creciendo con mucho margen para trabajar articuladamente con instituciones provinciales y nacionales. También trabajamos con la venta conjunta para que se puedan vender los corderos en tiempo y forma de manera formalizada, nos fue muy bien este año. Otra línea, apunta a financiar ferias de productores para que el mejoramiento genético de corderos vaya impactando en todos los rodeos de Neuquén. En cuanto a ganadería caprina estamos trabajando con líneas de financiamiento en el marco de una emergencia que nos pegó fuerte, con nevadas por un lado y sequías por otro.
Tratamos de vender animales de refugo para tener un ingreso marginal, estamos bastante bien parados gracias a toda la infraestructura que incorporamos con financiamiento (más de $400 millones en infraestructura predial como, a cobertizos, aguadas, potreros) para poder hacer un mejor manejo de ese ganado. Ahora apuntamos a un buen uso para que la producción siga mejorando.
También nos destacamos por la producción de Mohair. Neuquén es la principal provincia productora del país, estamos trabajando fuertemente para poder exportar.
¿Cuáles son los principales desafíos que enfrentan las producciones?
No quiero dejar de desconocer las emergencias en ganadería que han producido una reducción en el stock. En estos momentos hay una nevada muy fuerte y sabemos que esto va a impactar, pero queremos seguir apostando a que tenemos que estar mejor preparados y con más herramientas. En cuanto al acceso al agua trabajamos con 3500 familias para que tengan resuelto el problema, eso nos hace estar mejor preparados aunque falta mucho por hacer.
Tenemos una chacra experimental en Campana Mahuida abocada a generar la mejor genética ovina, caprina y bovina. En acuicultura estamos en pleno desarrollo, tuvimos 10 concesiones acuícolas en la última década, y en los últimos 3 años asistimos a la llegada de inversores de Chile y Mar del Plata. Se trata de empresas dedicadas a la pesca y a la exportación de otros productos que han mirado con buenos ojos a Neuquén. Además, pusimos en marcha una planta de procesamiento de pescado, pudimos exportar vía Chile más de 500 toneladas y anunciamos 15 toneladas de otra concesión que está en pleno desarrollo.
En cuanto a horticultura, aplicamos un programa para tener la trazabilidad. También existe uno de los mercados de concentración más grandes de la Patagonia ubicado en Neuquén Capital. Apuntamos a que haya cada vez más productores que se sumen al programa de Buenas Prácticas con una ley de premio estímulo para aquellos que las aplican y para que podamos lograr precios más diferenciales. Aún nos queda mucho por cubrir en productos hortícolas, en verdura de hoja estamos aumentando la producción y queremos apuntar a eso, a que haya más productores y más producción.
Respecto al medio ambiente, ¿qué acciones están realizando para mitigar los efectos del cambio climático?
Contamos con una mesa interministerial que trasciende proponiendo metas concretas. Una de ellas son las Buenas Prácticas Agropecuarias. Para darte un ejemplo, estamos tratando que los campos, tengan solamente la carga que pueden recibir. Para ello tenemos leyes y programas específicos que estimulan eso, así como la ley premio estímulo para el productor que cuida el agua y puede dar garantías de inocuidad. También tenemos una ley de incentivo ganadero gracias a la cual otorgamos un diferencial de dinero al productor que obtiene una lana mejorada. También pagamos un diferencial por el animal viejo o no productivo que se saca del campo para un manejo más adecuado del mismo.
Por otra parte, el área de bosques nativos tiene un impacto muy fuerte en el cuidado del ambiente por lo que significa el bosque per sé y su diversidad. En este sentido, trabajamos para que las áreas que se deforesten sean las menos posibles.