En un momento de fuerte alza en los precios de la carne vacuna, los consumidores buscan alternativas más económicas y versátiles para satisfacer sus necesidades proteicas. En este contexto, la carne de cerdo se presenta como una opción cada vez más atractiva debido a su precio y variedad de cortes disponibles. No obstante, hay uno que los especialistas destacan gracias a su variedad para la cocina y su accesibilidad económica: la paleta.
“La oferta de cortes se ha incrementado y hay una posibilidad amplia de elegir, algunos con una aceptación alta en los consumidores como la bondiola o el matambrito y otros por ser baratos, accesibles y rendidores”, dice el consultor Juan Uccelli. En el país se consumen 20 kilos por habitante por año de carne de cerdo.
La paleta de cerdo, en particular, viene ganado protagonismo en la mesa de los argentinos gracias a su versatilidad culinaria. Este corte se obtiene de la parte delantera del animal, específicamente de la parte superior del hombro. Esta parte de la carne es conocida por ser jugosa y ligeramente más grasa que otras partes magras del cerdo, como el lomo.
No hay límites para la utilización y queda liberado al inventor cocinero que llevamos dentro”, remarca sobre las posiiblidades de utilización. En rigor, este corte se presta a una amplia gama de preparaciones, desde ser cocinado entero al horno, similar a la pata de jamón en eventos especiales, hasta formar parte de guisos y estofados que acompañan a las pastas.
También puede disfrutarse a la parrilla como una chuleta entera. “Mediante un hervor de 40/50 minutos se puede hacer carne desmenuzada para ser utilizada como relleno de empanadas, de sándwiches, de canelones o el tradicional pastel de papa. El caldo obtenido de esta cocción es ideal para hacer risotto o sopas”, comenta.
Desde el punto de vista económico, la paleta de cerdo se presenta como una opción altamente competitiva en comparación con la carne vacuna. En la actualidad, su precio al público oscila entre los $900 y $1450 por kilogramo, lo que la coloca en un rango de precios similar al pollo entero y la hace aproximadamente un 50% más económica que su contraparte bovina.
El mes pasado los precios de la carne vacuna aumentaron 30,2% según el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva). El pollo lo hizo un 16,1% y el pechito de cerdo, según el Ipcva, un 19,6%. De las tres carnes, interanualizadas la carne de cerdo fue la que menos subió: la vacuna la hizo un 124,9%, el pollo un 118,2% y el pechito de cerdo un 105,4%.
Es en los detalles donde la carne de cerdo muestra su ventaja económica. Excepto en el caso del matambre, donde la diferencia es inferior al 10%, los cortes de carne porcina se encuentran entre un 38% y un 57% más económicos que los cortes equivalentes de carne vacuna. Con el precio de un kilogramo de asado, se pueden adquirir 1,6 kilogramos de pechito de cerdo, y con un kilogramo de paleta vacuna, se obtienen más de 2,3 kilogramos de paleta de cerdo.
La Nación Campo