La producción agropecuaria sufre el impacto de la sequía. Las lluvias llegaron tarde y la falta de agua afectó al primer tramo de la campaña.
CREA realizó una encuesta a 1458 empresarios CREA y a 214 asesores, que arrojó una situación crítica en la disponibilidad de alimentos para los animales. “En lo que respecta a las actividades de ganadería de carne, el 61 % de los grupos CREA informó que cuenta con una producción de recursos forrajeros regular a mala.
En el caso de la lechería, la proporción asciende al 82 %. De esta manera, las empresas tuvieron que cambiar la dieta de los animales,
Se optó por un uso más intensivo de concentrados “Esto complica la gestión financiera de muchas empresas, además de retrasar la siembra de recursos forrajeros que deberían conformar las reservas del próximo invierno”, explicó la encuesta de CREA.
En cuanto a los cereales de invierno, el relevamiento arrojó que la mayor parte de las regiones experimentaron pérdidas productivas respecto de los rendimientos esperados al inicio de la campaña. “La proyección de los datos relevados a nivel nacional indica que la cosecha de trigo argentina 2023/24 sería de 13,7 millones de toneladas versus una cifra esperada a comienzos del ciclo de unos 17,5 millones de toneladas”, planteó el informe final.
Al mismo tiempo, la cosecha fina se proyecta regular, pero las empresas dependen en gran medida de la campaña de verano. Sería la forma de recomponer su situación económica y financiera.
“En cuanto a las empresas lecheras, por primera vez para esta época del año las expectativas para los próximos cuatro meses son de menor producción debido a las complicaciones climáticas que impactan de manera desfavorable a la oferta forrajera”, concluyó el informe.
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