La lucha de un productor para cambiar la imagen del campo y trabajar para la comunidad Wichí: busca un "agro presente" y da un ejemplo con un camión de soja

El campo quiere cambiar la opinión de aquellos que tienen una mala imagen del sector productivo. Esta tarea se volvió casi una forma de vida y de lucha para el productor y acopiador Ricardo Villar.

El referente de acopiadores de la zona de Coronel Pringles, Buenos Aires, decidió, como dice él, pasar a la acción. Para alcanzar este objetivo buscó convertir al agro en protagonista.

Villar se preguntó cómo revertir la mirada de los prejuicios que pesan sobre el sector. Como respuesta y forma de lucha, el productor bonaerense señaló que se hace con un “agro presente”. “Significa ser protagonista en el lugar donde te movés. Se pueden hacer acciones sociales y una integración público-privado con el sector agropecuario”, explicó.

Hasta el momento realizaron ayudas en un centro de día, en talleres, pintando una iglesia, y hasta comprando un tomógrafo y una cocina para un hospital, repasó Villar. 

Por otra parte, el acopiador mantiene una relación con la comunidad Wichí y se da de la mano del impulsor de la Fundación Siwok, Alejandro Deane. Se trata de una entidad que trabaja en mejorar la calidad de vida de la población indígena en Salta. Desde la creación de pozos de agua, hasta la producción de agricultura familiar.

Ricardo y Alejandro se conocieron en una escuela pupila y ahí se forjó la relación. A partir de este trabajo, Villar se comprometió a fortalecer la relación con la comunidad.

Agro presente

Villar está convencido en trabajar sobre el cambio de la imagen del sector. Para unir al campo con la sociedad como forma de lucha, el acopiador contó un ejemplo: “Si te pido 260.000 pesos, ¿me darías? En cambio, si un productor entrega un camión de soja, y de los treinta mil kilos de soja, le pido mil kilos para el hospital, me los da”. 

En este sentido, apuntó que el productor le acaba de dar 260.000 pesos sin darse cuenta. Para resaltar este trabajo, Villar insistió que no le deben a agradecer a él que fue intermediario, sino al productor que donó la soja

Para Villar trabajar con la comunidad es muy importante. Una anécdota que siempre cuenta como ejemplo del agro presente fue la colaboración que se realizó en el jardín de Coronel Pringles. “Me agarra una maestra y me dice, ‘mirá a todos estos chiquitos, se quedan dormidos en la sala por el calor que hace acá. ¿Vos no podés conseguir un aire acondicionado?’”, contó. El acopiador contó que ahí decidió colaborar, pero no donarlo, sino trabajar con la comunidad. “Hicimos unos abanicos con una tarjeta y todos los chiquitos con témpera mojaron el dedo y pusieron la firma. Le pedíamos a la gente, ¿no me cambiás el aire? Yo te doy un aire solidario con el abanico y vos colaborás con el aire acondicionado”, explicó.

Finalmente, resalta que bajo esta modalidad de trabajo, le pidieron un aire acondicionado pero logró juntar cuatro para el jardín.

Agrofy