Por Agroempresario.com
Martín Almiña, Ingeniero Industrial y apasionado por la regeneración de los sistemas vivos, es uno de los mentores detrás de la Red de Compostaje. Esta iniciativa tiene como objetivo unir a diversos actores del compostaje, desde proveedores hasta gobiernos, para promover y sostener esta práctica que consideran fundamental.
Según Martín, "Conectarse con la naturaleza nos hace bien, ya sea desde el compostaje o incorporando pequeños hábitos. Tener plantas cerca, cuidarlas, simplifican nuestros pensamientos y nos inspiran día a día".
Comenzar con el compostaje puede ser intimidante, pero Valentín Rumen, cofundador de Greenheads Argentina, nos asegura que es más sencillo de lo que parece. Basta con dedicar unos minutos al día para juntar residuos orgánicos vegetales en una compostera y proporcionar las condiciones adecuadas para la descomposición controlada, que es llevada a cabo por miles de microorganismos.
Al embarcarse en el compostaje, se pueden lograr numerosos beneficios, como el ahorro de hasta el 50% de los residuos generados y la reducción de las emisiones de gas metano, lo que contribuye a combatir el cambio climático. Además, se obtiene un abono fértil de forma gratuita, se transforman los residuos en recursos y se ahorra agua gracias a la capacidad de retención del compost.
Sin embargo, es importante tener en cuenta algunos aspectos clave. Por ejemplo, los cítricos pueden acidificar el compost, por lo que se recomienda trozar las cáscaras y dejarlas secar antes de compostarlas. Además, mantener un equilibrio adecuado entre residuos húmedos y secos es esencial para el éxito del proceso.
En cuanto al uso de lombrices, estas pueden acelerar el compostaje, pero es fundamental proporcionarles un ambiente adecuado, con material fresco y húmedo.
Uno de los errores comunes al compostar es no alcanzar la proporción adecuada de material seco, que debería ser del 60%. Para evitarlo, se pueden incorporar materiales como aserrín, cartón u hojas secas.
Para asegurar el éxito del compostaje, es recomendable seguir algunos consejos prácticos, como involucrar la mayor variedad posible de residuos vegetales, mezclarlos adecuadamente, remover el contenido periódicamente y observar el proceso para detectar cualquier problema.
Una vez que el compost esté listo, se puede reconocer por su temperatura ambiente, su aspecto homogéneo, su color oscuro y su olor a bosque o tierra húmeda.
En cuanto a la elección de una compostera, lo importante es encontrar una que se adapte a nuestras necesidades y posibilidades, considerando factores como el espacio disponible, el número de personas en el hogar y el tipo de residuos que se compostarán.
En el mercado existen diversas opciones, desde composteras fabricadas con plástico reciclado hasta modelos de madera tratada para resistir la intemperie. Lo fundamental es dar el primer paso y comenzar a compostar, contribuyendo así a cuidar el medio ambiente y conectar con la naturaleza de una manera práctica y significativa.