El centro de análisis económico Equilibra analizó que, para esta campaña agrícola 2024/25 que se inicia, los productores que alquilan “podrían sufrir perjuicios económicos si los arrendamientos no ajustan a la baja”.
De hecho, desde hace casi un año, la rentabilidad promedio, que pueden alcanzar los productores en las distintas zonas agrícolas, se encuentra por debajo de los arrendamientos de mercado, con una brecha del 18% en mayo.
Considerando la diferencia entre arrendamiento de mercado y capacidad de pago de este mes, para las 4 zonas analizadas, se observó “mucha heterogeneidad”.
El mayor diferencial se registró en el sudoeste bonaerense, donde el alquiler de referencia debería llegar al 38% para igualar la capacidad de pago del productor. El descenso es algo menor en las regiones del oeste de Buenos Aires, con un 29%, y el núcleo maicero, con un 12%. Por el contrario, la capacidad de pago de arrendamientos del productor equipara al valor de mercado en el sudeste de Buenos Aires.
Este escenario se da ante un pronóstico de menores precipitaciones a las normales (fase Niña del ENSO), precios internacionales de los granos relativamente bajos y posibles inconvenientes sanitarios en maíz por la chicharrita.
Desde julio de 2022, Equilibra realiza el seguimiento de los arrendamientos agrícolas de mercado, es decir lo que cobra el dueño del campo, y potenciales (capacidad de pago del productor) en 4 zonas productivas extensivas de la Región Pampeana (Núcleo Maicero; Oeste, Sudoeste y Sudeste de Buenos Aires) para los principales granos (soja, maíz, trigo y girasol).
Los alquileres agrícolas de mercado se mantuvieron en torno a los US$400 por hectárea en promedio para las regiones evaluadas desde mediados de 2022 y fines del año pasado. Sin embargo, a partir de noviembre de 2023 se ubicaron debajo de US$350 por hectárea, lo que significa una merma del 12,5%
En tanto, el arrendamiento “máximo potencial” (capacidad de pago del productor) mostró tendencias similares, pero con mayor volatilidad.
“En promedio, estos superaron US$600 por hectárea entre octubre de 2022 y marzo de 2023, gracias a los altos precios internacionales de los granos. Luego, comienza una tendencia bajista, en línea con los precios internacionales, sostenida hasta marzo de 2024 y una leve recuperación en abril a mayo, por el descenso de costos en dólares de los fertilizantes”, indicó el reporte.
TNCampo
