Por Agroempresario.com
La palta tiene su origen en América Central y del Sur, especialmente en países como México, Colombia y Venezuela. Sin embargo, su producción se ha extendido a otras regiones.
Según la Fundación Española de Nutrición (FEN), la palta es notable por ser una fuente rica en grasas saludables, como las vitaminas E, K, C, magnesio y potasio, que contribuyen a mantener la salud cerebral y prevenir el deterioro cognitivo.
El ácido oleico presente en la palta es crucial para la formación y mantenimiento de las células cerebrales, mejorando así la memoria.
Un estudio realizado por la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign, publicado en el Journal of Psychophysiology, examinó a personas durante 12 semanas. Naiman Khan, profesor de kinesiología y salud pública y coordinador del estudio, destacó que la ingesta regular de paltas mejoró significativamente los resultados en pruebas cognitivas realizadas semanalmente, en comparación con aquellos que no las consumieron con la misma frecuencia.
Las paltas son ricas en luteína, un antioxidante natural asociado con la mejora de la capacidad cognitiva y la salud cerebral.
Khan también mencionó que la fibra y las grasas monoinsaturadas presentes en las paltas podrían desempeñar un papel clave en la salud del cerebro.
Para futuros análisis, Khan sugirió investigar otros nutrientes presentes en las paltas y cómo influyen en medidas como el peso corporal, la inflamación y posibles cambios en el microbioma.