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Por Agroempresario.com
Según un artículo reciente de La Nación, la producción de naranja destinada a uso industrial podría experimentar un notable crecimiento en los próximos años en Argentina. La industria cítrica señala que una reducción global en la producción, impulsada principalmente por la enfermedad de Huanglongbing (HLB), ha ocasionado un aumento significativo en los precios de la fruta. En 2023, el valor FOB de exportación aumentó un 60% en comparación con 2022, y se espera que los precios se mantengan elevados a largo plazo, lo que convierte a este sector en particularmente atractivo. En respuesta a esta oportunidad, algunos productores en el noroeste argentino han comenzado a reemplazar las plantaciones de limón, que están experimentando una tendencia opuesta, por variedades de naranjas más adecuadas para uso industrial.
José Carbonell, presidente de la Federación Argentina del Citrus (Federcitrus), comentó: "En los próximos tres años, anticipamos un crecimiento significativo en la superficie cultivada de naranjas, especialmente de variedades orientadas a la industria, debido al fuerte incentivo económico. Los precios son favorables tanto para la fruta fresca como para sus derivados industriales: cáscara, jugo y aceite, debido a la significativa reducción mundial en la producción de naranja durante las últimas dos décadas debido al impacto del HLB".
El HLB es una enfermedad bacteriana devastadora que afecta específicamente a los cítricos, y ha reducido drásticamente la producción global de naranjas desde su descubrimiento en China en 1943.
En otros lugares como Florida, EE.UU., la temporada 2022-2023 registró la menor cosecha de naranjas en 100 años debido a esta enfermedad. En contraste, en Brasil, el principal exportador mundial de jugo de naranja, aunque se están realizando esfuerzos para reponer las plantaciones, el proceso es lento debido a la magnitud de la caída en la producción.
El informe destaca que Argentina ha enfrentado un declive general en la producción y exportación de frutas en los últimos años, mientras que otros países han aumentado significativamente sus exportaciones gracias a políticas de promoción, impuestos más bajos, moneda estable y acceso al crédito.
La expectativa es que el sector de naranjas continúe creciendo en los próximos años en Argentina, aunque se necesitará tiempo para dinamizar completamente la producción de este cítrico y aprovechar al máximo las condiciones favorables del mercado.
