El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) finalizó la campaña 2023/2024 sin detectar Lobesia botrana (polilla de la vid), en el área vitivinícola de San Patricio del Chañar, Neuquén. A partir de la implementación del Plan Fitosanitario de Contingencia tras la detección de la plaga en 2022 en esa localidad, la Patagonia mantiene su estatus de Área Libre.
En este marco, el equipo del Centro Regional Patagonia Norte del Senasa implementó tareas de prevención, incluyendo restricciones al movimiento de frutas e intensificación de la red de trampeo. Además, fiscalizó las acciones sanitarias en cada establecimiento productivo del área reglamentada (conformada por una superficie de 3.532 hectáreas y compuesta por un área cuarentenada y un área bajo control).
En el mismo sentido, en colaboración con los actores institucionales del sector vitivinícola y bodeguero de esa zona regulada, se conformó un Comité de Emergencia para coordinar esfuerzos y recuperar el estatus de área libre de Lobesia botrana para la superficie afectada.
De acuerdo a lo estipulado por la normativa sanitaria, si en la próxima campaña (2024-2025) tampoco se detecta la presencia de la plaga se podrían iniciar los trámites para restaurar el máximo estatus sanitario en esta zona de producción vitivinícola del Neuquén.
Lobesia botrana es una plaga que ataca principalmente el cultivo de vid, por ello se la conoce comúnmente como "la polilla de la vid". Es una plaga de importancia cuarentenaria para la República Argentina que se encuentra bajo control oficial.
En la jurisdicción del Centro Regional Patagonia Norte que involucra a las provincias de Río Negro y Neuquén se encuentran instaladas 747 trampas para su monitoreo, de las cuales 190 trampas se encuentran dentro del área reglamentada de San Patricio del Chañar.
El Programa Nacional de Prevención y Erradicación de Lobesia botrana implementa acciones de control de la plaga, en las que se incluyen la puesta en marcha de planes de contingencia ante detecciones de la polilla de la vid, tal como ocurriera en el 2017 en Cafayate, Salta, y en Concordia, Entre Ríos, zonas en las cuales, después de un trabajo coordinado interinstitucional, se logró mantener el estatus de libre.