Por Agroempresario.com
La reciente disminución del Impuesto para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS), anunciada por el ministro de Economía, Luis Caputo, ha generado grandes expectativas en el sector agroindustrial argentino. Esta medida, que reduce la alícuota del impuesto del 17,5% al 7,5% para bienes y fletes, retrotrae el tributo a su nivel previo al 13 de diciembre de 2023, y podría tener un impacto notable en los costos de importación de maquinaria agrícola y fertilizantes.
Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), elaborado por Bruno Ferrari, Guido D’Angelo, Florencia Poeta y Julio Calzada, la reducción del impuesto promete un alivio fiscal significativo. En 2023, Argentina importó maquinaria agrícola por un valor CIF de US$ 528,6 millones, cifra que representó una disminución con respecto a los US$ 657,9 millones del año anterior.
La nueva medida podría implicar un alivio fiscal de aproximadamente US$ 52,8 millones anuales para el sector. Sin embargo, es crucial que la alícuota reducida no se reestablezca en diciembre, ya que esto podría significar una pérdida de aproximadamente US$ 39 millones anuales. La eliminación total del impuesto, prevista para diciembre, podría ofrecer un ahorro anual de alrededor de US$ 93 millones.
El informe también destaca que los fertilizantes representan una parte significativa de los costos de producción agrícola. Para la soja, los fertilizantes constituyen el 8% de los costos totales por hectárea; para el maíz, el 20%; y para el trigo, el 30%. En la región núcleo, estos porcentajes se ajustan a 6%, 17% y 26% respectivamente, dependiendo de si los costos se consideran en campo propio o bajo arrendamiento.
Argentina depende en gran medida de fertilizantes importados, con una dependencia del 60% en 2023, que se eleva al 67% si se considera el período 2018-2023. Los fertilizantes nitrogenados y fosfatados, que representan el 58% y el 35% del consumo total en 2023, son los principales afectados por esta dependencia.
La reducción del Impuesto País podría reducir significativamente el costo de estos insumos cruciales, dado que el 54% del consumo de fertilizantes nitrogenados y el 73% de los fosfatados son importados.
A pesar de la reciente mejora en la humedad de los suelos y la salida de la sequía histórica, el volumen importado de fertilizantes en 2024 ha mostrado una tendencia a la baja en los últimos meses. Datos preliminares sugieren que el volumen importado en agosto podría ser el más bajo desde 2017, con un acumulado anual levemente por debajo del promedio de los últimos cinco años.
Este descenso en la comercialización podría afectar la disponibilidad y los precios de los fertilizantes, haciendo que el impacto de la reducción del Impuesto País sea aún más relevante para el sector agroindustrial. La falta de claridad sobre la implementación de la baja del impuesto ha llevado a una reducción en la actividad del mercado, pero se espera que una eliminación total a partir de diciembre ofrezca un panorama más favorable para 2025.
Con un promedio de importaciones de fertilizantes de aproximadamente US$ 2.137 millones anuales para los años 2021-2023, la eliminación del impuesto implicaría un retorno de más de US$ 374 millones anuales a las cadenas agroindustriales, ofreciendo un impulso significativo para el sector y mejorando la disponibilidad y costos de los insumos agrícolas.
El ajuste en el Impuesto País podría ser un cambio crucial para la industria agroindustrial argentina, con un impacto potencialmente positivo en los costos de maquinaria y fertilizantes. Las fluctuaciones en los precios internacionales y la eficacia de la implementación de la medida serán factores clave para evaluar su éxito en la próxima cosecha.