Por Agroempresario.com
Dolores, una ciudad situada al sur del río Salado, se ha convertido en el epicentro de una celebración gastronómica única. En un evento que ha capturado la atención de locales y turistas, un sándwich de matambre de 20,7 metros de largo ha sido preparado por el grupo de emprendedores "Gastronómades". Esta monumental pieza, realizada con 57 baguettes y 16 kilos de matambre criollo, no solo es un deleite visual, sino que también simboliza el 207º aniversario de la fundación de la ciudad, conocida como el "Primer Pueblo Patrio".
“Acá se sirve así, solo pan y matambre, sin aderezos ni queso”, aclaran desde Gastronómades, resaltando la autenticidad de este platillo regional. La longitud exacta del sándwich no es casual; ha sido diseñada para conmemorar un hito significativo en la historia de Dolores, que se remonta a la declaración de independencia en 1817.
La pasión por el matambre criollo en Dolores está profundamente arraigada en su cultura. Alfredo Facundo “Fito” Celasco, cocinero de Gastronómades, explica: “Somos una zona de producción ganadera por excelencia, con pasturas de calidad y un frigorífico que respalda nuestra cultura gastronómica”. Este corte de carne, que suele condimentarse con ajo, orégano y otros ingredientes, es un clásico que los locales se enorgullecen de mantener vivo.
Florencia Roqués, también de Gastronómades, enfatiza el compromiso de preservar las tradiciones culinarias. “Nuestra idea es rescatar la tradición del pueblo que consumía el matambre de esta forma, arrollado y lleno de sabor”, añade, recordando que este corte alguna vez fue considerado un descarte.
La celebración del matambre no es un evento aislado. En Dolores, las tradiciones gastronómicas continúan con otros récords, como la Torta Argentina de diez metros, que demuestra la versatilidad y creatividad de sus habitantes en el ámbito culinario. La ciudad también se destaca por la famosa pizza de matambre, un platillo que no se encuentra en otras partes del país.
A medida que la fila de entusiastas crece en la Plaza Castelli, cada persona sostiene un vale para retirar su porción y una calcomanía de la campaña “Yo Amo al Matambre”. Esta festividad, más que una simple degustación, es una celebración de identidad cultural y un llamado a todos a disfrutar de las raíces gastronómicas de la región.
Con eventos como estos, Dolores se posiciona no solo como un destino turístico, sino también como un referente de la rica herencia culinaria argentina, donde cada bocado cuenta una historia.