Por Agroempresario.com
Con la llegada de la primavera, los cambios de temperatura no solo afectan el clima, sino también a las plantas, que comienzan su ciclo de crecimiento. Paula Caffarena, más conocida como Paula Eco, especialista en jardinería y miembro de Jardineras en Acción, advierte, en una nota de La Nación, que durante esta época es fundamental cuidar la calidad del suelo para garantizar que nuestras plantas se desarrollen de manera saludable.
“El cambio en las temperaturas produce modificaciones biológicas en los vegetales, que necesitan cubrir sus requerimientos para crecer”, explica Paula Eco. Entre sus recomendaciones, destaca la importancia de reforzar la prevención sanitaria utilizando materia orgánica para corregir las imperfecciones que el suelo pudo haber acumulado durante el invierno. Los hongos de suelo y las plagas latentes son amenazas que debemos evitar para asegurar que la tierra en macetas y jardines mantenga su calidad.
La especialista señala que la jardinería actual promueve trabajar el suelo para regenerar su riqueza, mejorar la producción y evitar el ataque de plagas y enfermedades. “El uso de microrganismos, bacterias y hongos ayuda a asimilar los nutrientes y mejorar la estructura del suelo”, explica. Un suelo vivo y productivo prepara a las plantas para enfrentar los cambios climáticos y previene problemas sanitarios.
Para garantizar un suelo saludable, Paula Eco sugiere agregar humus de lombriz, compost, micorrizas, Azospirillum y Bacillus thuringiensis (BT) al suelo. Estos elementos fomentan el desarrollo de raíces fuertes, promueven el crecimiento de las plantas y generan una biopelícula que repele insectos estacionales y larvas. Este tipo de cuidados también mejora el sustrato para el crecimiento de nuevas especies.
Otro consejo crucial es renovar la nutrición del sustrato durante todo el año en macetas, canteros y contenedores. Según Paula Eco, los contenedores limitan el acceso de las raíces al alimento, lo que requiere una mayor atención al sustrato, ya que con los riegos se pierden microelementos esenciales. Para compensar, recomienda agregar vitaminas naturales, polisacáridos y aminoácidos que fortalezcan las plantas ante cambios de temperatura y la dureza del agua.
Una sugerencia práctica es aplicar Polyamino: después de regar, se debe agregar 250 cc por maceta de 10 litros cada 7 días. Este cuidado asegura un suelo vivo, rico en nutrientes, y con buena capacidad de drenaje, lo que favorecerá un jardín floreciente y frutales saludables.
Con estos consejos de Paula Eco, el jardín estará preparado para aprovechar al máximo la primavera y resistir las condiciones adversas, manteniendo las plantas saludables y productivas.