Por Agroempresario.com
Brasil anunció un aumento en su meta de reducción de gases de efecto invernadero, pasando del 59% al 67% para 2035 en comparación con los niveles de 2005. Esta nueva contribución, presentada como parte de su Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC), busca alinearse con los compromisos globales del Acuerdo de París, que tiene como objetivo limitar el aumento de la temperatura global a 1,5°C por encima de los niveles preindustriales.
La nueva meta brasileña implicaría una reducción de entre 850 y 1.050 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) para 2035. "Este compromiso permitirá a Brasil avanzar rumbo a la neutralidad climática hasta 2050", afirmó el gobierno en un comunicado oficial. La NDC será entregada por el vicepresidente brasileño, Geraldo Alckmin, durante la COP29, que se celebrará en Bakú, Azerbaiyán, del 11 al 22 de noviembre de 2024.
Sin embargo, la propuesta ha generado críticas por parte de organizaciones ambientales. El Observatorio del Clima, una red de entidades brasileñas, señaló que las nuevas cifras no están alineadas con la necesidad de Brasil de adoptar un compromiso más ambicioso para frenar el calentamiento global. “Las cifras no se ajustan a los compromisos ya adoptados por el gobierno ni a la promesa de deforestación cero”, advirtió Marcio Astrini, secretario ejecutivo de la organización, en un comunicado oficial.
Astrini también señaló que la nota oficial omitió detalles esenciales sobre la estrategia para abordar la deforestación y la expansión de los combustibles fósiles. Según el observatorio, Brasil debería presentar un plan más transparente para cumplir con sus responsabilidades climáticas y contribuir de manera justa a la estabilización del clima global.
En otro avance positivo, el gobierno de Lula reportó una disminución de más del 30% en la tasa de deforestación de la Amazonía, lo que representa la mayor caída porcentual en los últimos 15 años. Este dato subraya los esfuerzos en la lucha contra la destrucción del pulmón verde del planeta, aunque aún se mantiene la discusión sobre el alcance de las políticas implementadas para lograr una reducción significativa a largo plazo.