Por Agroempresario.com
La meta de desinflación planteada por el Gobierno de cara a los próximos meses enfrenta una resistencia mayor a la prevista, especialmente por las alzas en los precios de los alimentos y las tarifas de los servicios públicos. A menos que se tomen decisiones adicionales, la inflación de noviembre podría superar las expectativas, lo que pondría en duda el cumplimiento de las metas del Ejecutivo.
El monitoreo de precios realizado por consultoras especializadas, como Eco Go, detectó incrementos en los valores de los alimentos, especialmente en productos clave como la carne, que han comenzado a mostrar una tendencia al alza típica de esta época del año, ante la proximidad de las fiestas de fin de año. A la vez, el Gobierno sigue comprometido con la eliminación gradual de los subsidios a los servicios públicos, lo que podría traducirse en aumentos adicionales en las tarifas de luz y gas.
Según Eco Go, la inflación de noviembre se prevé en torno al 2,8%, con los alimentos a la cabeza de las subas, estimándose un incremento del 3%. A su vez, la consultora LCG reportó un aumento en los precios de los alimentos, con una aceleración en la segunda semana de noviembre, que alcanzó un 1,5% en comparación con el 0,7% registrado en la semana previa.
Frutas, lácteos y panificados son los productos que más subieron en las últimas semanas. Por su parte, Price Stats, la consultora de Alberto Cavallo, advirtió que la inflación mensual también se aceleró, pasando de un 2,1% a un 2,8% en los primeros 20 días de noviembre.
Si bien la tendencia inflacionaria podría ser a la baja, los aumentos en las tarifas de servicios públicos podrían obstaculizar el objetivo de desinflación. Luis Caputo, ministro de Economía, había señalado que las actualizaciones de tarifas deberían seguir el ritmo de la inflación. No obstante, con la cercanía del verano, se prevé un ajuste en los costos de generación de energía, lo que impactaría directamente sobre las tarifas finales.
El Gobierno se enfrenta a una disyuntiva: ¿moderar los aumentos en tarifas o cumplir con las metas inflacionarias? Durante la época estacional, especialmente hacia las fiestas de fin de año, los precios tienden a presionar al alza, principalmente en alimentos, mientras que las tarifas de electricidad y gas también pueden experimentar aumentos.
Otro factor clave para las próximas semanas es el comportamiento del precio de la carne. Con las fiestas de fin de año en el horizonte, las carnicerías y supermercados ya están recibiendo aumentos de entre el 4% y el 7% en los cortes de carne, un incremento que supera las subas observadas en semanas anteriores.
Andrés Costamagna, consultor y directivo de la Sociedad Rural Argentina, prevé que los precios de la carne se ajustarán un 20% más en las próximas semanas. Este aumento, junto con la inflación de otros productos, podría complicar aún más el panorama económico para los últimos meses del año.
El Gobierno se enfrenta a una serie de decisiones cruciales que definirán el rumbo económico de los próximos meses. ¿Cómo manejará las tarifas de los servicios públicos y los combustibles, cuya regulación está bajo su control? ¿Mantendrá el Gobierno su compromiso de desinflación o se verá obligado a reconsiderar su estrategia ante el aumento de los precios?
Con las fiestas de fin de año acercándose, la presión sobre los precios será aún más fuerte, lo que complica el cumplimiento de las metas del Gobierno para cerrar el año con una inflación controlada. Habrá que esperar las decisiones que tomen las autoridades para enfrentar estos desafíos y asegurar un ajuste económico equilibrado.