Brasil está en el tramo final de las negociaciones para ingresar carnes a Turquía con bajos aranceles. “Inicialmente Brasil deberá aceptar el establecimiento de una cuota reducida, entre 4.000 y 5.000 toneladas, además de cumplir con la exigencia de presentar pruebas sanitarias de la carga” aclaró la prensa brasileña y consignó que “la estrategia pasa por abrir las puertas y luego ampliar su inserción en territorio turco, donde los precios de la carne han aumentado drásticamente”.
En efecto, el precio de la carne vacuna en Turquía subió un 200%, lo que llevó a los consumidores locales a reducir en un 30% la compra de este producto, priorizando la demanda de pollo. “El sector privado brasileño estima un potencial de envío de hasta 300 mil toneladas por año” agregó la prensa y señaló que “actualmente, la tasa arancelaria turca para la carne vacuna es del 225% pero fuentes del sector exportador afirman que un arancel de hasta el 20% sería aceptable para las negociaciones, aunque se discute la posibilidad de que la tasa ronde el 12%”.
AgroNoa