Por Agroempresario.com
Hace apenas unos años, Animal World era una pequeña forrajería en la ciudad de Posadas, Misiones, al borde de la quiebra. Hoy, la marca se ha consolidado como una exitosa cadena de tiendas de mascotas, con planes de expansión a nivel nacional e internacional. Su historia es la de Facundo Moroni, un joven de 18 años que, en medio de una crisis familiar, dejó sus estudios para tomar las riendas del negocio y transformarlo en lo que es hoy: un referente en el sector de las mascotas en Argentina.
"Nunca me imaginé que iba a estar al frente de la empresa familiar", confiesa Moroni. En 2014, cuando su familia atravesaba serias dificultades económicas, el joven aún estaba en pleno inicio de su carrera en Derecho. Sin embargo, la necesidad de salvar el negocio llevó a Moroni a tomar una decisión inesperada: involucrarse a fondo en la gestión de la tienda familiar. Con su padre emocionalmente afectado y su hermano menor aún en la escuela, Facundo se convirtió en el inesperado líder del proyecto.
Revolucionando el mercado local
La primera gran decisión fue transformar lo que era una tienda convencional en una experiencia para los clientes. Moroni y su equipo de trabajo decidieron cambiar el enfoque tradicional de la venta de productos para mascotas y, en su lugar, apostaron por crear un espacio que fuera mucho más que un simple punto de venta. “Queríamos que nuestros clientes vivieran una experiencia única, que sintieran algo diferente al ingresar a la tienda", explica el emprendedor.
Aprovechando la gran cantidad de mascotas en los hogares argentinos, que ubica a Argentina entre los países con mayor tasa de mascotas por habitante, Moroni identificó una oportunidad de crecimiento dentro de un sector que, aunque prometedor, estaba estancado. "A pesar de la crisis económica, si logramos mantener estabilidad, este mercado tiene un potencial enorme", afirma. Con esta visión en mente, la tienda comenzó a ofrecer un ambiente más agradable, con música de fondo, un diseño moderno y, sobre todo, atención personalizada, algo poco común en el sector.
La importancia del aprendizaje autodidacta
Sin formación en administración de empresas, Moroni tuvo que aprender sobre la marcha. Sus primeras experiencias en negocios fueron limitadas a pequeños emprendimientos de su niñez, por lo que el desafío fue significativo. “Me vi obligado a ser autodidacta. Leía sobre negocios, finanzas, marketing, y aplicaba lo aprendido de manera práctica”, comenta. La falta de recursos no fue un obstáculo, y con el tiempo, Moroni pudo acceder a una formación más estructurada, como su paso por el IAE en 2023, donde obtuvo herramientas fundamentales para llevar la empresa a un nivel profesional.
Actualmente, Animal World cuenta con cinco sucursales en Misiones y está a punto de inaugurar la sexta, en Posadas. Además, la marca abrirá su primera franquicia en Oberá, adquirida por un ex empleado, lo que representa un logro significativo para Moroni, ya que es un reflejo del compromiso interno y de la visión de crecimiento compartido.
El modelo de negocio de Animal World ha sido probado con éxito. Con una inversión inicial de US$ 100.000 para abrir cada tienda, el negocio asegura una recuperación de la inversión en un período de 18 a 24 meses, dependiendo de las condiciones del mercado y la ubicación. En 2024, Animal World dio un paso crucial con el rebranding de sus tiendas, buscando adaptarse a las nuevas tendencias del mercado y ofrecer una experiencia más atractiva para sus clientes.
Una de las principales apuestas de Moroni es la creación de Wondy, una línea de accesorios para mascotas que busca satisfacer la creciente demanda de productos de calidad. Según Moroni, el mercado argentino tiene una oferta limitada en este rubro, por lo que Wondy viene a llenar ese vacío con productos innovadores que también estarán disponibles en mercados internacionales. “Queremos ofrecer soluciones que realmente se adapten a las necesidades de los clientes y posicionar nuestra marca en el mercado global”, explica.
Además del éxito económico, Animal World se distingue por su compromiso con el triple impacto: económico, social y ambiental. Desde la implementación de prácticas sostenibles hasta la participación en proyectos comunitarios, la empresa busca generar un impacto positivo más allá de las ventas. Este enfoque no solo ha atraído a más clientes, sino que ha fortalecido el compromiso de los empleados y socios comerciales.
Moroni tiene grandes planes para el futuro. Con el objetivo de abrir más tiendas y consolidar su red de franquicias, sabe que la clave del éxito radica en adaptarse a los cambios del mercado. “El desafío más grande es entender mejor al consumidor y seguir innovando. El mundo cambió, especialmente después de la pandemia, y necesitamos estar un paso adelante", concluye el joven emprendedor.
Animal World, bajo el liderazgo de Facundo Moroni, es un ejemplo claro de cómo, en tiempos de adversidad, las oportunidades pueden transformarse en historias de éxito, llevando a una pequeña empresa familiar a consolidarse como un actor relevante en el mercado de mascotas de Argentina.