Por Agroempresario.com
En un contexto de negociaciones intensas y decisivas, el Gobierno nacional ha intensificado sus contactos con los gobernadores, actores fundamentales en el proceso legislativo de las sesiones extraordinarias. Estos encuentros, que involucran a autoridades nacionales y provinciales, no solo están enfocados en resolver las disputas legislativas en curso, sino también en avanzar con compromisos de inversión en infraestructura, asistencia para la emergencia de incendios en la región sur y otras demandas que surgen desde las provincias.
Durante las últimas semanas, figuras clave del Ejecutivo, como el jefe de Gabinete Guillermo Francos, el vicejefe del Interior Lisandro Catalán y el ministro de Economía Luis Caputo, han recibido a diversos mandatarios provinciales en la Casa Rosada. Las reuniones, además de abordar la cuestión fiscal y de infraestructura, han sido una plataforma para tratar la asistencia de emergencia frente a los incendios que afectan a varias provincias patagónicas y para avanzar en la discusión de proyectos legislativos cruciales que podrían definir la dirección de las políticas nacionales en el corto y mediano plazo.
A finales de enero, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el vicejefe de Gabinete, Lisandro Catalán, se reunieron con el gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, para avanzar en acuerdos sobre la consolidación de la deuda entre la Nación y la provincia. Durante este encuentro, se discutieron además planes para la ejecución de proyectos de infraestructura y la inversión federal en esa región. También estuvo presente Martín Maccarone, secretario de Coordinación de Infraestructura, quien acordó con Figueroa que el Gobierno central tomará la responsabilidad de algunas de las obras clave en la provincia.
El contacto con los gobernadores no se limitó a Neuquén. A mediados de enero, los mandatarios de Catamarca, Tucumán, Salta y Jujuy, así como el ministro de Hacienda de Misiones, Adolfo Safrán, se acercaron a la Casa Rosada para profundizar las negociaciones sobre diversas iniciativas. Estos encuentros resultaron clave para destrabar el proyecto que busca suspender las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), que ya obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados y ahora espera su votación en el Senado. La colaboración de los gobernadores, especialmente en el Congreso, será fundamental para facilitar el avance de estos proyectos.
El Gobierno también ha hecho frente a la emergencia en el sur del país, donde los incendios forestales han causado estragos, especialmente en provincias como Chubut y Río Negro. Durante los últimos días, el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, solicitó ayuda a la Nación para combatir los incendios que están afectando la Patagonia. Tras su visita a la Casa Rosada, Weretilneck regresó a su provincia con una respuesta concreta del Ejecutivo nacional, que incluyó asistencia material y financiera. Según informó el jefe de Gabinete, se enviaron a la región 9 aviones, 10 helicópteros, 4 autobombas forestales, 61 brigadistas, y un total de 12.000 millones de pesos en fondos adelantados para la reconstrucción de viviendas en Chubut y Río Negro.
En el caso de Santa Cruz, el gobernador Claudio Vidal también acudió al Gobierno nacional, aunque en esta ocasión no se trató de una solicitud de asistencia por incendios, sino de un enfoque en la promoción de inversiones en la región. En particular, las conversaciones se centraron en proyectos estratégicos vinculados a YPF, Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT), la minería aurífera en la provincia y obras en infraestructura vial. Vidal, quien representa a una de las provincias clave para la explotación de recursos naturales, ha enfatizado la importancia de seguir adelante con inversiones federales para fortalecer el desarrollo local.
En este panorama, el vicejefe de Gabinete Lisandro Catalán ha tomado un rol protagónico. Según fuentes cercanas al Gobierno, Catalán ha asumido una mayor responsabilidad en las reuniones con los gobernadores y en la gestión de los conflictos territoriales. Este aumento de su visibilidad se debe, en parte, a que el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ha centrado sus esfuerzos en la gestión operativa y administrativa del Gobierno. Catalán, en tanto, ha mantenido un contacto constante con los mandatarios de las provincias más afectadas por los incendios y otros desafíos regionales, como el caso de Chubut, cuyo gobernador Ignacio Torres ha destacado el acompañamiento federal tras los desastres provocados por los incendios.
El papel de los gobernadores no solo ha sido clave en las negociaciones para conseguir fondos y ayuda material, sino también en la contienda legislativa. En particular, los mandatarios provinciales desempeñan un papel crucial en el Senado, donde los proyectos de ley impulsados por el Poder Ejecutivo enfrentan mayor resistencia. Aunque algunos proyectos, como la suspensión de las PASO y la nueva ficha limpia, ya han avanzado en Diputados, la aprobación en el Senado sigue siendo incierta. Los gobernadores pueden actuar como puentes entre el oficialismo y la oposición, buscando consensos y ayudando a destrabar las iniciativas más controvertidas.
Uno de los proyectos más esperados es el de la designación del juez Manuel García Mansilla a la Corte Suprema, que aún no cuenta con el apoyo suficiente para ser aprobado en el Senado. El Ejecutivo, ante la falta de acuerdo, podría optar por una designación por Decreto, lo que generaría una mayor tensión en las relaciones entre el Gobierno y la oposición. En este sentido, los mandatarios provinciales podrían jugar un papel decisivo al mediar en las conversaciones y buscar soluciones que faciliten el avance de este y otros proyectos clave.
A medida que se acerca el 20 de febrero, fecha límite para que finalicen las sesiones extraordinarias en el Congreso, el Gobierno enfrenta la presión de reunir los votos necesarios para convertir en ley varios proyectos clave. Entre ellos se destacan la suspensión de las PASO y la nueva ficha limpia, dos iniciativas que cuentan con el respaldo del Ejecutivo pero que aún necesitan el apoyo de los senadores para convertirse en ley.
Los gobernadores, con su influencia en los distritos y en el Senado, continúan siendo piezas clave en este rompecabezas legislativo. En especial, su capacidad para negociar y cerrar acuerdos con la oposición será esencial para que el Gobierno logre cerrar un ciclo legislativo exitoso.