Por Agroempresario.com
El 2024 fue un año de fuerte recuperación para las exportaciones agroindustriales argentinas, que crecieron un 60% en comparación con 2023, superando los 89,3 millones de toneladas de granos y derivados. A pesar de la histórica sequía que afectó a la producción de 2023, el país logró aumentar su volumen de embarques, alcanzando cifras impresionantes que incluso superaron el promedio de los últimos cinco años. Este crecimiento ha sido fundamental para la economía argentina, con una recuperación notable en la cosecha agrícola, que alcanzó los 132 millones de toneladas durante la campaña 2023/24.
Luego de la sequía de 2023, que dejó una producción agrícola afectada y de difícil recuperación, Argentina vivió una verdadera remontada en 2024. Según un informe elaborado por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), la cosecha de granos aumentó un 60% interanual, un total de 33,3 millones de toneladas adicionales con respecto a 2023. Esta cifra representó el despacho de 89,3 millones de toneladas, lo que no solo marcó una notable recuperación, sino que también superó el promedio de los últimos cinco años por un 1%, aunque aún se encuentra por debajo del récord histórico de 2019.
El informe, redactado por Belén Maldonado, Emilce Terré y Julio Calzada, destacó que este crecimiento estuvo impulsado principalmente por el aumento en las exportaciones de maíz, trigo y soja, que juntos representaron el 96% de la recuperación en los despachos de granos. El maíz fue el principal responsable del repunte, con 12,3 millones de toneladas adicionales, seguido por un aumento de 4,8 millones de toneladas de trigo y 2,1 millones de toneladas de soja.
En términos de subproductos, los embarques totalizaron 29,5 millones de toneladas, lo que representó un aumento del 56% en comparación con 2023, un incremento que también superó el promedio de los últimos cinco años en un 5%. Este crecimiento se explicó casi en su totalidad por el aumento en los despachos de pellets de soja, que registraron un repunte de 10,4 millones de toneladas. También se observó un aumento significativo en los embarques de pellets de girasol (+151.300 toneladas) y pellets de trigo (+55.500 toneladas).
En cuanto a los aceites vegetales, las exportaciones crecieron un 60% en 2024, alcanzando un total de 7,2 millones de toneladas, lo que representó un aumento del 21% respecto al promedio histórico. El aceite de soja fue, una vez más, el principal responsable de este crecimiento, con 2,4 millones de toneladas adicionales, mientras que también se registró un incremento en los envíos de aceite de girasol, con 259.600 toneladas.
Una de las claves del crecimiento de las exportaciones argentinas ha sido la capacidad de los puertos del Gran Rosario, que concentraron casi el 76% de los embarques en 2024. Estos puertos, que van desde Timbúes hasta Arroyo Seco, son los principales puntos de salida de los productos agroindustriales del país, gracias a su proximidad a las zonas productivas y su capacidad para procesar grandes volúmenes de oleaginosas. En total, los puertos del Gran Rosario despacharon 67,7 millones de toneladas en 2024, un 60% más que el año anterior.
Sin embargo, la participación de estos puertos fue ligeramente inferior al promedio de los últimos diez años, debido principalmente a los bajos niveles del río Paraná durante la segunda mitad del año, lo que dificultó la salida de los productos desde la región. A pesar de esta caída, el Gran Rosario sigue siendo el centro neurálgico de las exportaciones argentinas, con una importante participación en los envíos de granos, subproductos y aceites.
A pesar del predominio del Gran Rosario, otros puertos de Argentina también jugaron un papel clave en el año 2024. Los puertos de Bahía Blanca, por ejemplo, fueron responsables del despacho de 10,8 millones de toneladas de granos y derivados, lo que representó el 12% del total de exportaciones argentinas. Por su parte, los puertos de Necochea y Quequén enviaron 7,6 millones de toneladas, lo que representó el 9% del total. Los puertos de Zárate, Ramallo, San Pedro y Villa Constitución, aunque en menor medida, también contribuyeron con 3,1 millones de toneladas de productos agroindustriales.
En términos de destino, el continente asiático ha sido el principal receptor de los productos agroindustriales argentinos, con el 53% de los embarques dirigidos a Asia en 2024. Este volumen representó más de la mitad de los productos exportados, destacándose Vietnam como el principal destino con 11,1 millones de toneladas, un incremento del 109% respecto al año anterior.
China, por su parte, mantuvo su posición como uno de los principales destinos de los embarques, con 7,1 millones de toneladas enviadas en 2024, lo que representó un aumento del 56% interanual. También se destacó Perú, que recibió 5,8 millones de toneladas, un 45% más que en 2023, consolidándose como uno de los principales socios comerciales de Argentina en la región.
En cuanto a los productos, Vietnam fue el principal receptor de los granos argentinos, con 7 millones de toneladas despachadas en 2024, un aumento del 126% interanual. China y Brasil también fueron destinos relevantes para los granos, con 6,7 millones y 4,7 millones de toneladas, respectivamente.
El fuerte crecimiento de las exportaciones de granos y derivados en 2024 es una muestra del potencial de recuperación del sector agroindustrial argentino después de la sequía de 2023. A medida que los mercados internacionales siguen demandando productos como el maíz, el trigo y la soja, Argentina se posiciona como uno de los principales proveedores globales de alimentos y subproductos agroindustriales.
El fortalecimiento de los puertos del Gran Rosario y la diversificación de destinos hacia Asia, en especial Vietnam y China, son factores que seguirán impulsando el crecimiento de las exportaciones en el futuro cercano. A pesar de los desafíos logísticos, como las fluctuaciones del río Paraná, las perspectivas para 2025 son positivas, con un sector agroindustrial que sigue siendo un pilar clave de la economía argentina.