Por Agroempresario.com
La Fiesta Nacional de La Chaya 2025 se consolidó como un evento clave en la política cultural y turística de La Rioja, reafirmando el modelo impulsado por el gobernador Ricardo Quintela, que apuesta al desarrollo de la identidad local como motor de crecimiento económico y social. Con más de 46 mil asistentes y una recaudación bruta de 517 millones de pesos en venta de entradas, la Chaya no solo fue un éxito artístico, sino también un pilar fundamental en la dinamización del turismo y el comercio riojano.
El festival generó un fuerte impacto económico en la región. Se estima que el turismo derivado del evento generó ingresos superiores a los 1.500 millones de pesos, impulsando la ocupación hotelera al 98% en toda la provincia. Más de 50 empresas riojanas participaron en la provisión de servicios y concesión de puestos gastronómicos, generando empleo directo para miles de trabajadores locales. Además, el evento movilizó a 3.000 personas encargadas de logística, seguridad, asistencia técnica y organización.
La primera noche tuvo como figura estelar a Abel Pintos, quien emocionó al público con un show inolvidable. Junto a él, destacaron La Bruja Salguero, Cristian Herrera y Trulalá, en una jornada que combinó identidad y talento local con estrellas de renombre.
El sábado, la segunda noche estuvo marcada por la imponente actuación de Soledad, una de las artistas más reconocidas del país, reafirmando la proyección nacional del festival. Su presencia en el escenario fue uno de los momentos más ovacionados de la Chaya, y en reconocimiento a su trayectoria, recibió el tradicional poncho riojano y la caja chayera. Además, el carismático Sergio Galleguillo llevó el carnaval chayero a su máxima expresión, en una noche que incluyó a figuras como Gloria de la Vega, Los de Alberdi y Cristian "El Loco" Amato.
El domingo, la Chaya 2025 cerró con un espectáculo multitudinario. La Konga y Eugenia Quevedo pusieron el broche de oro con una fiesta cuartetera, mientras que Orellana Lucca reforzó la esencia folclórica del evento con chacareras y zambas. Un momento destacado fue la consagración de Gloria de la Vega como artista revelación, en reconocimiento a su trayectoria y su impacto en la música riojana.
Pero la Chaya no es solo un festival, sino una política de Estado en La Rioja. Bajo la conducción de Ricardo Quintela, el evento se ha transformado en un motor de desarrollo que potencia el turismo, la cultura y el trabajo local. La estrategia de promoción e inversión en eventos culturales de gran magnitud ha permitido que la Chaya trascienda como uno de los festivales más importantes del país.
El festival también fue un ejemplo de convivencia y respeto, con mínimos incidentes y contravenciones, según los registros de la Policía de la Provincia.
Con un balance positivo en todos los aspectos, La Chaya 2025 consolidó su lugar como el evento más importante de La Rioja y también reflejó el impacto de una política cultural que apuesta por el arraigo, el turismo y el crecimiento económico, marcando el camino hacia un modelo de provincia que pone en valor su identidad y proyecta su potencial a nivel nacional.