Por Agroempresario.com
En un encuentro con el ministro de Economía, Luis Caputo, la Unión Industrial Argentina (UIA) presentó sus reclamos y propuestas para abordar la creciente presión tributaria que afecta al sector. La plana mayor de la entidad fabril destacó la deuda acumulada por los impuestos nacionales, que asciende a $500.000 millones, y denunció el aumento de tasas municipales que no implican servicios a cambio. Este reclamo se enmarca en un contexto de fuerte incertidumbre económica, donde las empresas enfrentan dificultades crecientes para sostener su competitividad debido a la carga fiscal.
El documento entregado por la UIA al ministro de Economía incluyó una serie de puntos críticos sobre la actual estructura impositiva, destacando tres áreas principales: la deuda impositiva por saldos a favor de impuestos nacionales, la presión por las retenciones en provincias y las tasas municipales que afectan directamente a las empresas. El informe se basó en una encuesta realizada a diversas industrias, en la que se reflejaron las dificultades financieras que están atravesando muchas empresas a raíz de la acumulación de saldos a favor y la falta de devolución o compensación de los mismos.
De acuerdo con la entidad, el monto pendiente de devolución de saldos a favor supera los $500.000 millones, una cifra que limita la liquidez de las empresas y genera un impacto negativo en su capacidad operativa. La UIA destacó que el 41% de las empresas acumula saldos a favor en al menos un impuesto nacional, como el IVA, el Impuesto a las Ganancias, el Impuesto PAIS y los reintegros por exportaciones. El informe subraya que la suspensión de los certificados de exclusión de IVA y Ganancias es una de las principales causas de la acumulación de estos saldos.
La UIA también puso de manifiesto los efectos financieros negativos que genera la acumulación de saldos a favor. Según el informe, el 42% de las empresas encuestadas aseguró que los saldos representan entre uno y tres meses de sus obligaciones mensuales de IVA, mientras que un 13% afirmó que los saldos superan los tres meses. Solo el 5% de las empresas señaló que sus saldos a favor superan los doce meses de obligaciones tributarias. Esta situación es especialmente grave para las pequeñas y medianas empresas (PyMEs), que enfrentan mayores dificultades para afrontar sus compromisos fiscales debido a la falta de liquidez.
Además, la UIA destacó que este problema afecta directamente a la competitividad de las empresas, ya que limita la disponibilidad de capital de trabajo y genera costos adicionales por los intereses generados por la deuda. Ante esta situación, la entidad fabril propuso una revisión urgente de los mecanismos de devolución y compensación de los saldos a favor, con el fin de aliviar la presión financiera sobre las empresas y mejorar su competitividad en un mercado global cada vez más desafiante.
Otro de los puntos destacados en el informe fue el problema relacionado con las retenciones del Impuesto a los Ingresos Brutos, que afectan a las empresas en diversas provincias del país. La UIA denunció que en varias jurisdicciones las provincias están aplicando retenciones fuera de sus límites territoriales, lo que obliga a las empresas a pagar este impuesto en distritos donde no tienen establecimientos. Esta situación genera costos adicionales y aumenta la complejidad del sistema fiscal, especialmente para las PyMEs, que deben afrontar gastos administrativos para cumplir con las normativas tributarias.
Según la UIA, la falta de un sistema homogéneo de recaudación y la disparidad en los criterios de aplicación de este impuesto generan incertidumbre y dificultan la planificación financiera de las empresas. El informe también señaló que el saldo a favor promedio de las empresas en Ingresos Brutos ascendió a $385 millones en el primer trimestre de 2024, un aumento del 170% respecto al año anterior.
El tercer punto clave en la presentación de la UIA fue el aumento de las tasas municipales, que también están impactando negativamente a las empresas. La entidad fabril denunció que, en muchos municipios, las tasas no tienen una contraprestación clara, es decir, no se corresponden con los servicios efectivamente prestados. Según los datos proporcionados por la UIA, en 2021, el 51% de las tasas municipales no implicaba contraprestación alguna, mientras que en 2024 esa cifra había aumentado al 81%.
Además, en muchas localidades se han incrementado las alícuotas y ampliado las bases imponibles, lo que ha generado una mayor presión fiscal sobre las empresas. El informe también destacó la falta de un criterio homogéneo en la determinación de las tasas municipales, lo que genera confusión y dificultades adicionales para las empresas a la hora de planificar sus costos. Los sectores más afectados son aquellos con mayor volumen de actividad y consumo energético, que deben afrontar tasas más altas en función de estos parámetros.
Ante este panorama, la UIA presentó una serie de propuestas para aliviar la carga tributaria que afecta al sector industrial. En primer lugar, la entidad fabril planteó la necesidad de revisar los mecanismos de devolución de saldos a favor de impuestos nacionales, para garantizar que las empresas puedan acceder a esos fondos de manera más rápida y eficiente. También se propuso una reforma en el sistema de recaudación de Ingresos Brutos, con el fin de eliminar las retenciones fuera de los límites territoriales y simplificar el régimen de recaudación.
En cuanto a las tasas municipales, la UIA propuso la implementación de un sistema más transparente y homogéneo, que garantice que las tasas se correspondan con los servicios prestados y que se establezcan límites a la carga fiscal. La entidad también sugirió que se evalúe la posibilidad de unificar criterios en todo el país, lo que facilitaría la planificación financiera de las empresas y reduciría los costos administrativos.