Por Agroempresario.com
El sector agroexportador reportó una caída del 15% en la liquidación de divisas correspondiente a marzo, en comparación con el mes anterior, según datos proporcionados por la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) y el Centro Exportadores de Cereales (CEC). La cifra alcanzó los 1880 millones de dólares, marcando una diferencia de 300 millones menos respecto de febrero.
A pesar del descenso mensual, el acumulado del primer trimestre del año ofrece un panorama más alentador, con un total ingresado de 6134,5 millones de dólares. Esto representa un incremento del 26% frente al mismo período de 2024, y un 20% más en comparación con marzo del año pasado, lo que refleja un desempeño dispar en el contexto de un mercado volátil.
La baja en la liquidación de divisas ocurre en un escenario marcado por la volatilidad cambiaria, con un aumento en las cotizaciones de los dólares financieros en las últimas semanas y una pérdida significativa en las reservas del Banco Central. Además, los incentivos temporales dispuestos por el Gobierno para el sector, como la reducción del 20% promedio en los Derechos de Exportación (DEX) para productos como soja, maíz, trigo y girasol, entre otros, parecen no haber generado el impacto esperado de manera inmediata.
Este esquema de reducción temporal de retenciones, que estará vigente hasta el 30 de junio, obliga a los exportadores a liquidar divisas dentro de los 15 días posteriores a la registración de las Declaraciones Juradas de Exportación (DJVE). Según analistas del mercado, este marco normativo podría traducirse en un mayor flujo de divisas en las próximas semanas, dado el repunte de ventas observado hacia el cierre de marzo.
Un informe de RIA Consultores subrayó que las ventas primarias de soja comenzaron con un ritmo débil durante las dos primeras semanas de marzo. Sin embargo, en la tercera y cuarta semana se observó una recuperación significativa, alcanzando niveles comparables con los de febrero. Este repunte coincide con el inicio de la cosecha de soja de la campaña 2024/25 en regiones como el centro-norte de Córdoba, lo que podría acelerar aún más las ventas en abril.
“La liquidación de divisas es esencial para garantizar la compra de granos a precios competitivos y mantener activo el circuito productivo”, indicaron desde Ciara-CEC. La relación directa entre las divisas ingresadas y la compra de granos, tanto para su exportación en estado natural como para su procesamiento industrial, sigue siendo un pilar del modelo agroexportador argentino.
Con la entrada en plena actividad de la cosecha de soja, que es el principal generador de divisas del sector, se espera que el flujo de liquidaciones recupere impulso en las semanas venideras. Los especialistas también anticipan un impacto positivo en las Declaraciones Juradas de Exportación, lo que fortalecerá la dinámica comercial y su contribución al ingreso de divisas.
En un contexto económico complejo, el desempeño de la agroexportación continúa siendo un factor clave para el equilibrio macroeconómico del país. Aunque persisten desafíos asociados a la incertidumbre cambiaria y los niveles de retenciones, el sector mantiene su rol estratégico como motor de ingreso de divisas y como elemento estabilizador en tiempos de volatilidad.