Por Agroempresario.com
Con una contundente victoria en las elecciones para convencionales constituyentes, el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, se impuso con el 34,61% de los votos y quedó a escasos escaños de alcanzar la mayoría necesaria para avanzar con la reforma de la Constitución provincial. El mandatario radical no solo celebró el triunfo sino que lo utilizó como plataforma para comenzar a delinear su proyecto político a futuro.
En una elección marcada por la baja participación —apenas el 55% del padrón— Pullaro se posicionó ampliamente por encima de sus competidores. El peronista Juan Monteverde obtuvo el 15,15% de los sufragios y el libertario Nicolás Mayoraz quedó tercero con el 14,11%. Más atrás se ubicaron Amalia Granata, con el 12,35%, y Marcelo Lewandowski, otro referente del PJ, con el 8,44%. La sorpresa de la jornada fue Alejandra "Locomotora" Oliveras, quien logró el 5,61% de los votos y quedó con posibilidades de acceder a una banca como convencional.
Pullaro podrá contar con entre 32 y 33 convencionales, sobre un total de 69. Si bien no alcanza por sí solo los 36 necesarios para aprobar las 43 reformas propuestas —entre ellas, la habilitación de la reelección del gobernador—, el oficialismo quedó muy cerca y ya evalúa posibles alianzas para alcanzar ese número clave.
"Es un día importante y trascendente. Abrimos una puerta hacia el futuro", expresó Pullaro ante sus seguidores, acompañado por la vicegobernadora Gisela Scaglia. En su discurso, el mandatario fue enfático: “Vamos a terminar con los fueros parlamentarios y con las reelecciones indefinidas. Discutimos un futuro sin corrupción, una legislatura sin corruptos”.
Sin embargo, prefirió no hacer mención directa a la cláusula que le permitiría competir por un nuevo mandato a partir de 2027. Lo cierto es que, con el apoyo mayoritario obtenido, Pullaro empieza a consolidar su figura como uno de los líderes más fuertes del radicalismo a nivel nacional.
Uno de los datos salientes de la jornada fue la escasa concurrencia a las urnas. La participación apenas superó el 55%, un número que generó preocupación tanto en el oficialismo como en la oposición. "Es un minuto contra el futuro de los próximos 20 o 30 años", dijo Pullaro tras emitir su voto en Hughes, su ciudad natal, en un intento de motivar al electorado.
El dato no es menor: sectores opositores criticaron la falta de información sobre la naturaleza de la elección, y acusaron al gobierno provincial de no haber incentivado debidamente la participación. Desde el peronismo sostuvieron que la baja afluencia favoreció al oficialismo. “Ya en campaña habíamos dicho que el oficialismo se encargaba de que la gente no supiera qué se votaba”, señalaron cerca de Monteverde.
Dentro del justicialismo, Juan Monteverde logró imponerse como la principal referencia del espacio. Junto a Lewandowski y Roberto Sukerman, el sector peronista sumó en conjunto cerca del 30% de los votos. “Somos segunda fuerza a nivel provincial, primeros a nivel de concejales en Rosario, y a tres puntos de ganarle a Pullaro acá”, señaló Monteverde. El dirigente peronista ya se proyecta como un potencial candidato a intendente de Rosario en 2027.
Sin embargo, la dispersión de votos dentro del PJ muestra la necesidad de una futura unidad para consolidarse como verdadera fuerza opositora. Las internas entre Monteverde y Lewandowski, sumadas a las diferencias con otros sectores kirchneristas, deberán resolverse si pretenden disputar espacios de poder más relevantes en el futuro.
La performance de La Libertad Avanza quedó muy lejos de las aspiraciones presidenciales de Javier Milei. Nicolás Mayoraz no superó el 14,11% y apenas logró asegurarse cerca de 9 bancas como convencionales. Desde el entorno libertario, el único motivo de celebración fue el triunfo de Juan Pedro Aleart en el departamento Rosario.
La baja participación también fue un tema de preocupación para este espacio. “Fue poca gente a votar, hasta las 20 no tenemos datos”, comentaban desde su comando de campaña. A pesar de esto, el resultado fue mejor que el de otros aliados del espacio libertario, como Amalia Granata, quien con su discurso pro-vida logró quedar cuarta, superando incluso a varios nombres instalados en la política provincial.
La clave en el futuro cercano será la capacidad del oficialismo para tejer alianzas que le permitan alcanzar los 36 convencionales necesarios para avanzar con su propuesta de reforma constitucional. “Habrá que conversar y negociar”, admitió una fuente cercana al gobernador. En este sentido, Pullaro adoptó un tono moderado: “Tener la mayoría no nos da la razón”, advirtió, dejando abierta la posibilidad de diálogo con otros espacios.
Entre los cambios impulsados por el Ejecutivo santafesino no sólo figura la habilitación de la reelección del gobernador, sino también una batería de reformas vinculadas a la transparencia, el fin de los fueros parlamentarios, y mejoras en la estructura institucional de la provincia.
El comando oficialista ubicado en el Centro de Convenciones Puerto Norte fue escenario del festejo, que contó con la presencia del presidente de la UCR, Martín Lousteau, invitado especialmente por Pullaro. La presencia del senador nacional fue leída como un gesto de respaldo nacional al gobernador, quien empieza a posicionarse como figura clave dentro del frente opositor a nivel país.
Del lado del Gobierno nacional, el silencio fue absoluto. Ningún funcionario se hizo presente en los búnkeres libertarios, ni hubo declaraciones desde Casa Rosada. Este distanciamiento resalta las tensiones internas dentro del armado libertario y deja entrever un repliegue ante un resultado que no fue el esperado.