Por Agroempresario.com
En un paso clave para el desarrollo agrobiotecnológico provincial, el Ministerio de Desarrollo Agrario de la provincia de Buenos Aires firmó un acuerdo de cooperación con la Academia de Ciencias Agrícolas de Sichuan (SAAS), China. El objetivo: instalar el primer laboratorio de biología molecular en las chacras experimentales bonaerenses, profundizando los lazos científicos y tecnológicos entre ambas regiones.
El acuerdo fue rubricado por el ministro Javier Rodríguez y el presidente de SAAS, Mu Jinyi, en la Estación Experimental Gorina, en un acto que simbolizó no solo un avance técnico, sino también una apuesta estratégica por la ciencia, la innovación y la producción.
“El trabajo conjunto con China, en este contexto de desfinanciamiento nacional de la ciencia, es clave para sostener y proyectar nuestras capacidades productivas. Este convenio nos permite fortalecer desarrollos en genética vegetal y animal que impactarán directamente en la productividad bonaerense”, sostuvo Rodríguez.
El entendimiento entre el Ministerio y la SAAS prevé la instalación de un laboratorio destinado al mejoramiento genético de cultivos estratégicos para ambas partes, como la soja y el kiwi, así como el fortalecimiento de la cría de ganado Angus, raza emblemática de la ganadería argentina.
Además del desarrollo de infraestructura tecnológica, el acuerdo contempla el intercambio de material genético, la realización de investigaciones conjuntas y el traslado de expertos entre ambos países. Según Rodríguez, “la colaboración con SAAS potenciará trabajos ya iniciados en nuestras chacras experimentales, como en Miramar y Gorina, donde se vienen desarrollando variedades mejoradas de kiwi y genética bovina de alta calidad”.
El impulso biotecnológico también responde a un enfoque más amplio: expandir la frontera productiva, elevar la competitividad del agro bonaerense e incorporar innovación en cada eslabón de la cadena agroalimentaria.
Durante el acto, la delegación china plantó simbólicamente un Ginkgo Biloba, árbol milenario utilizado en la medicina tradicional china, como gesto de unión cultural y científica.
La comitiva china estuvo encabezada por Mu Jinyi e integrada por Lei Xiaokui, directora de la Oficina General; Zhou Pingping, jefa de la División de Cooperación en Ciencia y Tecnología; Zhu Yongqun, directora del Instituto de Investigaciones Agrícolas y Ambientales; Wang Ping, director del Instituto de Biotecnología y Tecnologías Nucleares; y Tu Meiyan, del Instituto de Horticultura.
Por parte del MDA participaron Juan Manuel Padin, subsecretario de Relaciones Internacionales; Cristian Amarilla, subsecretario de Desarrollo Agrario y Calidad Agroalimentaria; Javier Cernadas, director de Alimentos y Mercados Agroalimentarios; Cecilia Llabrés, directora de Relaciones Internacionales; Emiliano Cucciufo, director de Innovación Tecnológica; y Raúl Amado Cattaneo, coordinador del Programa de Mejoramiento Genético.
La Academia de Ciencias Agrícolas de Sichuan es una institución con 86 años de trayectoria, 18 centros de investigación y una fuerte política de transferencia tecnológica. Ha tenido un impacto decisivo en la reducción de la pobreza rural en su provincia de origen, con acciones sobre más de 11.500 aldeas y 6 millones de personas.
Bajo el lema “innovación y transformación”, SAAS implementó tecnologías que mejoraron el ingreso de pequeños productores y modernizaron la matriz productiva de Sichuan. Su experiencia es vista por el MDA como un modelo de articulación entre ciencia aplicada y políticas públicas de desarrollo rural.
El vínculo entre Buenos Aires y SAAS no es nuevo. Desde 2022 se mantiene una agenda bilateral con cuatro encuentros —presenciales y virtuales— y la firma de un memorando de entendimiento. Entre los temas prioritarios figuran:
Este nuevo acuerdo formaliza y profundiza esos lazos, agregando una dimensión práctica: la construcción y operación conjunta del laboratorio de biología molecular, que será único en su tipo en el sistema experimental público de la provincia.
“Desde la provincia seguimos apostando a la ciencia, a la producción con valor agregado y a un campo con innovación. Este laboratorio va a ser una herramienta para nuestra soberanía científica y productiva”, remarcó Rodríguez.
En tiempos en que los presupuestos nacionales para el sector científico se ajustan, Buenos Aires busca proyectar una agenda propia, articulada con socios estratégicos como China, que no solo aportan financiamiento, sino también know-how, redes y visión de largo plazo.