Por Agroempresario.com
La reciente decisión del Gobierno nacional de extender la rebaja de retenciones a las exportaciones solo para trigo y maíz, dejando afuera a la soja, desató fuertes críticas por parte de la Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (ACSOJA). Desde la entidad advirtieron que esta medida tendrá un fuerte impacto negativo en la planificación de la próxima campaña y anticiparon que, con esta presión fiscal, “habrá quebranto” para miles de productores.
En un comunicado oficial, ACSOJA calificó de “desproporcionada” la carga fiscal que pesa sobre el cultivo y reclamó la necesidad de otorgarle mayor competitividad al sector. “Es crítico darle competitividad al sector con mayor potencial de la economía para que el país crezca sostenidamente saliendo del estancamiento”, afirmaron.
La medida, publicada en el Boletín Oficial el pasado viernes, prorroga la baja temporal de Derechos de Exportación (DEX) solo para trigo y maíz, excluyendo a la soja. En un contexto donde los márgenes son cada vez más ajustados, esta exclusión genera preocupación entre los actores del complejo oleaginoso.
La entidad, presidida por Rodolfo Rossi, reconoce avances del Gobierno en áreas clave como la reducción del déficit fiscal, la baja de la inflación y la eliminación de trabas burocráticas, pero advierte que esta decisión representa “una vuelta atrás” que castiga especialmente al productor, justo en el momento en que se define la siembra de la próxima campaña.
Desde ACSOJA remarcan que “todas las instituciones de las cadenas agropecuarias han criticado este verdadero impuesto arbitrario, injusto y, en el caso de la soja, discriminatorio respecto de otros cultivos”.
El documento de la entidad también denuncia que la producción nacional de soja se encuentra “muy por debajo de su potencial”, no solo por cuestiones climáticas o tecnológicas, sino por la “incapacidad de los gobiernos de implementar soluciones inteligentes”. A su vez, se sostiene que liberar estas variables permitiría aprovechar tecnologías ya disponibles y recuperar competitividad en el mercado mundial de alimentos.
“Con esta desproporcionada carga fiscal, los números fríos de la campaña que se está planificando muestran claramente un escenario de quebranto para vastas zonas del país”, indica el comunicado.
Finalmente, ACSOJA reitera su pedido al Gobierno nacional para que revea la decisión de mantener la alícuota diferencial sobre la soja. “Instamos a las autoridades a comprender que las diferentes alícuotas entre cultivos generan un desincentivo artificial y absolutamente pernicioso para el país, al discriminar la producción de los cultivos que mayor valor agregado aportan y que tienen más demanda internacional”, concluye el texto.
El llamado desde la cadena sojera es claro: sin condiciones más justas, la campaña 2025 podría significar una fuerte pérdida económica para uno de los sectores más estratégicos del país.