Por Agroempresario.com
En un contexto de intensos debates sobre el rumbo económico, el Gobierno nacional, a través de uno de los principales asesores del Ministerio de Economía y actual director del Banco Central (BCRA), Federico Furiase, salió al cruce de las críticas respecto del presunto “atraso cambiario” y del déficit de cuenta corriente. El funcionario, alineado con la visión del ministro Luis Caputo y el presidente Javier Milei, defendió el fortalecimiento del peso y resaltó que el superávit fiscal constituye el eje estructural para una macroeconomía estable.
En declaraciones a Radio Rivadavia, Furiase remarcó que el programa económico implementado desde diciembre tiene como base tres pilares: equilibrio fiscal, fin de la emisión monetaria y acumulación de reservas internacionales. “Logramos un superávit fiscal, eliminamos la emisión y recapitalizamos el Banco Central con dólares líquidos disponibles. Además, pasamos a un régimen de flotación entre bandas, donde el mercado fija el tipo de cambio entre un piso y un techo”, explicó.
El economista apuntó que el fortalecimiento del peso no es un fenómeno artificial, sino consecuencia del éxito del programa. “Cuando hacés las cosas bien y lográs estabilizar, la moneda se aprecia endógenamente. No hay atraso cambiario, lo que hay es confianza en una macro sana”, afirmó.
Las palabras de Furiase se conocieron luego de que el banco de inversión JP Morgan advirtiera sobre el escenario económico argentino y recomiendan cautela a los inversores. La entidad señaló la existencia de un tipo de cambio poco competitivo y sugirió “dar un paso atrás” hasta ver mayor sostenibilidad.
Sin embargo, para el director del BCRA, esas advertencias deben analizarse en contexto. “Hay mucho ruido externo, con tasas altas y mercados volátiles, y también ruido político interno. Aun así, los fundamentos de la economía argentina se mantienen firmes y en crecimiento”, sostuvo.
Además, detalló que el producto bruto interno (PBI) creció un 5,8% anual en el primer trimestre, con un impulso notable del consumo privado (+11,6%), la inversión (+31,8%) y las exportaciones (+7,2%), lo que demuestra —según Furiase— que “la economía real responde positivamente a la estabilización macro”.
Consultado sobre el futuro del dólar, el funcionario descartó que el BCRA tenga un sendero predefinido o metas específicas de tipo de cambio. “En este régimen de flotación entre bandas, el BCRA no compra ni interviene para evitar distorsiones. Queremos que las expectativas se acomoden solas al nuevo sistema”, explicó.
No obstante, aclaró que el Tesoro nacional sí puede realizar compras de divisas en bloque, según lo determine su estrategia financiera. “No hay techo ni piso numérico definido, lo importante es que no se alteren las señales del mercado”, comentó.
Otro de los focos de crítica ha sido el déficit de cuenta corriente, que en el primer trimestre del año superó los US$ 5000 millones. Lejos de considerarlo un problema estructural, Furiase lo encuadra dentro de un proceso saludable. “Ese déficit refleja que el sector privado puede financiarse afuera con deuda a tasas sostenibles. Es decir, hay inversión, principalmente en bienes de capital y maquinaria, lo que es positivo si se mantiene el superávit fiscal”, enfatizó.
En ese sentido, sostuvo que la combinación de austeridad fiscal con inversión privada es el patrón deseado en esta etapa del programa económico. “No es un déficit como los de antes, donde todo lo financiaba el Estado con emisión. Hoy es distinto, el Estado se ordenó y el sector privado está traccionando con acceso al financiamiento”, argumentó.
Furiase también hizo hincapié en los obstáculos políticos que debieron sortear desde la asunción del nuevo gobierno. “Desde enero hubo especulaciones de que esto no duraba. El dólar subió por expectativas, pero después se estabilizó. Lo mismo ocurrió en julio. Cada vez que hay ataques políticos, hay volatilidad. Pero la economía se muestra resiliente cuando la macro está firme”, señaló.
Por último, reivindicó la sintonía total entre el presidente Milei y el ministro Caputo como una de las claves de la estabilidad. “Cuando hay coherencia entre lo que se dice y lo que se hace, el mercado lo percibe. Y por eso hoy el peso se fortalece y no hay necesidad de intervenir con reservas”, concluyó.