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Por Agroempresario.com
Las exportaciones de carne bovina de Brasil a Estados Unidos cayeron un 61,8% en junio, según datos oficiales de la Asociación Brasileña de la Industria de Carne (Abiec). La noticia encendió las alarmas del sector cárnico, ya que se trata del segundo mercado más importante para el país sudamericano, detrás de China. La baja coincide con la aplicación de nuevos aranceles adicionales, anunciados por el presidente Donald Trump, que podrían elevar los impuestos a las importaciones brasileñas hasta un 76,4%.
En abril, Brasil alcanzó un récord histórico de ventas de carne bovina al mercado estadounidense, con 47.836 toneladas exportadas. Sin embargo, la situación cambió drásticamente desde mayo, cuando comenzó a regir un arancel adicional del 10% que se suma al 26,4% ya existente.
Esto redujo la competitividad del producto brasileño, provocando que las exportaciones bajaran a 27.413 toneladas en mayo y luego a 18.232 toneladas en junio. Los datos preliminares de julio son aún más preocupantes: hasta el día 21 se habían registrado solo 9.745 toneladas exportadas, lo que augura una caída aún más profunda.
El panorama se vuelve más crítico con la amenaza de una nueva suba arancelaria del 50% a partir del 1 de agosto, lo que elevaría la tasa total al 76,4% para aquellos envíos que superen la cuota anual libre de arancel de 65.000 toneladas.
Ante este escenario, los frigoríficos brasileños han comenzado a suspender los envíos de carne a EE.UU., conscientes de que las mercancías que salgan ahora llegarán a destino bajo el nuevo esquema impositivo.
La Abiec advirtió que unas 30.000 toneladas de carne, valuadas entre 150 y 160 millones de dólares, podrían quedar varadas en tránsito o en puertos si no se logra una solución inmediata.
Roberto Perosa, presidente de la Abiec, pidió al Gobierno brasileño que intervenga urgentemente en el conflicto comercial. “Es necesaria una prórroga para renegociar los contratos”, expresó. También alertó que, sin una salida diplomática, se pondría en riesgo la viabilidad de las exportaciones a uno de los mercados más importantes del mundo.
El temor principal radica en que el impacto de estos aranceles no solo afecte a las empresas exportadoras, sino que también repercuta en toda la cadena productiva, desde los frigoríficos hasta los productores rurales.
Brasil es actualmente el mayor exportador mundial de carne bovina, con cifras que consolidan su liderazgo global. En el primer semestre de 2025, a pesar de la baja en mayo y junio, exportó un volumen récord acumulado de 156 millones de toneladas solo a Estados Unidos.
No obstante, la perspectiva de finalizar el año con cifras históricas está en riesgo. De mantenerse o ampliarse los aranceles, se prevé una disminución drástica en las exportaciones durante el segundo semestre, lo que podría impactar negativamente en el ingreso de divisas y la estabilidad del sector agroindustrial brasileño.
