Por Agroempresario.com
Córdoba, uno de los principales motores económicos de Argentina, ha dado un paso firme para avanzar en la construcción de la autopista sobre la Ruta Nacional N° 19, un corredor clave para el comercio y la seguridad vial en la región. En un acto encabezado por el gobernador Martín Llaryora, la provincia anunció la preadjudicación de las obras que permitirán completar 62,9 kilómetros entre San Francisco y la ciudad de Córdoba.
A pesar de los esfuerzos de Córdoba por avanzar en esta obra vital para la seguridad y el desarrollo económico, el gobernador Llaryora expresó públicamente su descontento con la falta de respuesta del Gobierno Nacional, que aún no ha firmado el decreto necesario para transferir la gestión de la ruta. El proceso de traspaso es considerado esencial para que las máquinas entren en acción y se pueda llevar adelante la obra.
“No podemos esperar más al Gobierno Nacional. Si no quieren hacer la obra, la hacemos nosotros. Solo necesitamos la firma de un decreto para poder entrar con las máquinas”, afirmó Llaryora, destacando que este trámite administrativo es sencillo pero aún pendiente.
La autopista de la Ruta 19 es vital para la conexión entre la ciudad de Córdoba y el norte de Santa Fe. La ruta, que soporta más de 3 millones de vehículos al año, es una arteria central para el tránsito tanto nacional como internacional, siendo parte de uno de los corredores bioceánicos más importantes de Argentina. El gobernador Llaryora hizo hincapié en que la obra tiene una fuerte carga simbólica, ya que la Ruta 19 es conocida como “la ruta de la muerte”, debido a la alta cantidad de accidentes que se producen en ella.
“San Justo es uno de los departamentos más productivos. Necesitábamos rutas, gas, líneas de alta tensión. Y lo pedimos, porque no se puede producir sin infraestructura. Eso es lo que no entienden los que defienden un modelo sin inversión: sin rutas, sin educación, sin ciencia, no hay país posible”, dijo Llaryora durante el acto.
La necesidad de una autopista en esta ruta fue un reclamo de décadas. En 2019, la comunidad de San Francisco y otras localidades del este provincial realizaron el llamado “Grito de San Justo”, un reclamo conjunto de vecinos e intendentes para exigir la ejecución de esta obra fundamental. Desde entonces, el Gobierno de Córdoba ha tomado la posta para garantizar la finalización del proyecto, que había quedado estancado durante años bajo la administración nacional.
En ese sentido, el intendente de San Francisco, Damián Bernarte, subrayó la importancia de que esta obra sea completada por un gobernador originario de la localidad: “Un sanfrancisqueño transforma la ruta de la muerte en la ruta de la vida. Para que este corredor productivo vuelva a tener que ver con lo que sale de los campos y las industrias. Va a ser un antes y un después en la historia de nuestras comunidades”.
Acompañaron al gobernador en este anuncio representantes de diversos municipios de la provincia, mostrando un apoyo unánime a la obra. Daniel Passerini, intendente de la ciudad de Córdoba, remarcó la relevancia de la infraestructura vial para la seguridad de los ciudadanos. “Como médico, puedo decir que es trascendental contar con rutas en condiciones para evitar accidentes fatales. En ese sentido, la decisión que tomó Martín Llaryora es una cuestión de vida o muerte”, indicó Passerini.
El proyecto, que cuenta con una inversión provincial de 196.308 millones de pesos, promete tener un impacto directo sobre la calidad de vida de los habitantes de la región. Además de mejorar la seguridad, la obra permitirá mejorar el flujo de transporte de productos agrícolas e industriales, elementos claves para el desarrollo de Córdoba y su conectividad con el resto del país.
En una entrevista posterior, el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos de Córdoba, Fabián López, remarcó el impacto internacional de esta obra: “Esta es una obra con impacto internacional, por ser una ruta del Mercosur, regional y nacional. El tránsito anual de esta ruta obliga que se transforme en una de las infraestructuras viales con mayor nivel de servicio, como lo es una autopista”.
En tiempos difíciles para el empleo, la obra será también un motor de generación de puestos de trabajo. Néstor Chavarría, secretario general de UOCRA, destacó el impacto positivo sobre el empleo en la región. “Esta decisión genera trabajo en este momento del país; hemos perdido 120 mil puestos de trabajo y que en Córdoba hayamos recuperado fuentes laborales es muy valorable”, expresó.
La obra, que estará dividida en tres licitaciones, tendrá un plazo estimado de 18 meses. Los trabajos incluirán la construcción de cuatro distribuidores de tránsito, seis retornos a distinto nivel, dos puentes sobre el río Xanaes, y diversas obras de drenaje, iluminación, señalización y forestación.
El proceso licitatorio fue dividido en tres tramos para agilizar su ejecución:
Finalmente, el ministro de Gobierno de Córdoba, Manuel Calvo, expresó su satisfacción con la decisión tomada por el gobernador: “Córdoba cumplió con el compromiso asumido y culminó en su momento los tramos que le corresponden. El Gobierno Nacional comenzó con algo que no terminó, y pasaron distintas gestiones y nunca terminaron. Y hoy, nuevamente, el Gobierno de Córdoba se hace cargo de algo que el Gobierno Nacional no puede resolver”.
Con el apoyo de autoridades municipales, empresariales y sindicales, Córdoba avanza en la construcción de esta autopista, que no solo mejorará la seguridad vial, sino que potenciará la competitividad de la provincia en un mercado global cada vez más interconectado. La Ruta 19 es esencial para Córdoba, y su transformación en autopista es un símbolo del compromiso de la provincia con el progreso, la seguridad y el bienestar de sus habitantes.