Por Agroempresario.com
En la antesala de la campaña de octubre, el Gobierno de Javier Milei enfrenta dos exámenes políticos que podrían marcar el pulso de la elección nacional: las elecciones provinciales en Corrientes, el 31 de agosto, y los comicios bonaerenses del 7 de septiembre. Ambos escenarios representan un doble desafío para La Libertad Avanza (LLA), que llega con incertidumbre y encuestas ajustadas, mientras el peronismo detecta un cambio favorable en el humor social.
En las últimas semanas, varios intendentes del peronismo de la Provincia de Buenos Aires (PBA) afirman haber notado un viraje en el ánimo de la ciudadanía. Desde la tercera sección electoral —núcleo fuerte del voto kirchnerista en el conurbano sur— aseguran que entre mayo y junio algo se modificó. “No diría que nos vienen a votar a nosotros, pero la negatividad hacia Milei es cada vez más evidente”, comentó un operador de la primera sección electoral, zona estratégica para el oficialismo.
Esta percepción ha encendido alertas en la Casa Rosada. La tercera sección se espera que dé al PJ una victoria amplia, pero en la primera, el oficialismo busca compensar votos con figuras como Diego Valenzuela, candidato a senador provincial. Históricamente, esta sección fue clave para María Eugenia Vidal en 2015 y 2017, aunque entonces contaba con un sólido respaldo de intendentes radicales y de la Coalición Cívica.
El presidente Javier Milei planea encabezar el acto inaugural de campaña en La Plata, donde las encuestas muestran un escenario parejo. Sin embargo, en el interior bonaerense —especialmente en la segunda y cuarta sección— la contienda sigue abierta. Sectores internos critican a los armadores provinciales por no haber sellado alianzas con intendentes como Pablo Petrecca o Santiago Passaglia, lo que podría debilitar la estrategia territorial.
En la quinta sección, el intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro, es visto como una pieza clave para garantizar un triunfo, aunque el peronismo podría obtener mejores resultados de lo previsto. La competencia en distritos como San Isidro, Vicente López, Tres de Febrero, Escobar, San Martín, San Fernando, Pilar, Morón, Ituzaingó y Merlo también será decisiva.
En el peronismo, la apuesta está en el despliegue del aparato electoral y en maximizar la presencia en la calle de cara al 7 de septiembre. Para el gobernador Axel Kicillof, el resultado será determinante, ya que decidió desdoblar las elecciones provinciales con vistas a fortalecer su proyección presidencial hacia 2027.
La apatía electoral registrada en comicios provinciales de este año es un factor de incertidumbre. Tanto en el oficialismo como en la oposición reconocen que movilizar al electorado será crucial. En ese contexto, el equipo de campaña encabezado por Karina Milei y Santiago Caputo define mensajes y estrategias para un escenario electoral complejo.
Antes de enfrentar el desafío bonaerense, LLA deberá competir en Corrientes, donde las perspectivas no son alentadoras. La falta de acuerdo con el gobernador Gustavo Valdés frustró una posible alianza. En su lugar, la fuerza oficialista llevará como candidato a gobernador al diputado Lisandro Almirón, quien según encuestas oscila entre el tercer y cuarto lugar.
La elección correntina, prevista para el 31 de agosto, definirá al sucesor de Valdés —con su hermano Juan Pablo Valdés como principal favorito— y renovará la legislatura provincial. En la contienda también participan figuras como el ex gobernador Ricardo Colombi y el intendente de Paso de los Libres, Martín Ascúa, representante del kirchnerismo.
En la capital correntina, LLA podría lograr un mejor desempeño gracias a su candidata a intendenta, bien posicionada en las encuestas. Sin embargo, en el interior, la estructura radical que respalda a Valdés se presenta como un obstáculo difícil de superar.
La estrategia adoptada en Corrientes ha abierto divisiones en LLA. Mientras el sector de Caputo considera que la apuesta podría ser costosa, el ala de los Menem sostiene que “todo es ganancia” al competir, incluso sin grandes expectativas de triunfo. No se descarta una nueva visita de Milei y Martín Menem a la provincia antes de la votación.
Un resultado adverso en Corrientes podría impactar en el ánimo del oficialismo y generar ruido en los mercados, complicando el arranque del sprint final hacia octubre.
Con un panorama incierto en PBA y Corrientes, el Gobierno evalúa un eventual relanzamiento de la gestión tras las elecciones legislativas. Las decisiones que tomen los hermanos Milei en las próximas semanas podrían implicar desde pequeños ajustes hasta cambios profundos en el gabinete.
Por ahora, solo se da por confirmada, de manera extraoficial, la candidatura de Patricia Bullrich al Senado por la Ciudad de Buenos Aires. Esto ya abrió debates internos sobre quién ocupará su lugar en el Ministerio de Seguridad. Las negociaciones con Mauricio Macri también están en marcha para definir la lista de la Ciudad, donde figura Fernando de Andreis.
Además, Karina Milei impulsa que algunos legisladores con mandato vigente, como Romina Diez, Gabriel Bornoroni y María Emilia Orozco, vuelvan a postularse en octubre para fortalecer las boletas provinciales.