Por Agroempresario.com
La infraestructura vuelve a ponerse en el centro del debate agropecuario en Argentina, especialmente tras el reciente Congreso Aapresid donde expertos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) y la Fundación Ecosur detallaron las posibilidades que tiene el país para duplicar su producción de granos en la próxima década. El análisis es contundente: con la incorporación de 3,4 millones de hectáreas adicionales y fuertes inversiones en logística, tecnología y obras viales, Argentina podría pasar de producir 135 millones a casi 259 millones de toneladas de granos.
Este pronóstico, difundido por Julio Calzada y Raúl Hermida, especialistas en economía agropecuaria y logística, enfatiza que el verdadero cuello de botella para aprovechar el potencial productivo está en la infraestructura, una variable fundamental para lograr eficiencia en el transporte y para reducir costos que hoy limitan la competitividad de la cadena agrícola argentina.
Tras la reducción de retenciones anunciada por el presidente Javier Milei hace unas semanas, el sector volvió a enfocar la atención en la importancia de mejorar la infraestructura nacional. En la charla del Congreso Aapresid, la agenda giró en torno a la necesidad urgente de desarrollar vías nacionales, mejorar rutas, ferrocarriles y la hidrovía, para que la producción pueda llegar a destino en tiempo y forma, esencial para obtener divisas por exportaciones.
Según explican desde la Bolsa de Comercio de Rosario, Argentina podría duplicar su producción con una combinación de medidas que involucran cambios económicos, ampliación de superficies cultivables, inversiones en infraestructura y adopción tecnológica. “Si se adoptan todas las medidas que se deben tomar, Argentina puede pasar de 135 millones de toneladas a casi 259 millones al cabo de 10 años”, asegura Calzada.
1. Cambios económicos
Para que el sector crezca, es fundamental la eliminación total de los derechos de exportación o retenciones y que no exista brecha cambiaria. Estos factores económicos permitirían mayor rentabilidad y previsibilidad a los productores.
2. Transporte y logística
Una de las mayores limitaciones para el agro argentino está en el transporte. Calzada destacó la necesidad de mejorar rutas y ampliar la matriz ferroviaria y navegable para aumentar la capacidad y velocidad del traslado de granos. Actualmente, Argentina transporta cerca de 15 millones de toneladas de granos y subproductos por ferrocarril, pero para llegar a la meta sería necesario transportar casi 40 millones.
Además, el dragado y balizamiento de la Hidrovía Paraná-Paraguay es un punto crítico. La BCR pide que el calado se amplíe de 34 a 40 pies para que los buques puedan salir con mayor carga, reduciendo costos logísticos. Hoy un buque tipo Panamax sale del Gran Rosario con entre 50.000 y 55.000 toneladas, cuando podría transportar hasta 70.000, lo que genera costos adicionales y demoras.
3. Eliminación de la brecha tecnológica
El plan también implica que los productores adopten mejores prácticas agronómicas, aumenten el uso de fertilizantes y mejoren la eficiencia productiva. Esto incrementaría la rentabilidad y sostenibilidad del sector.
4. Expansión de la superficie cultivada
El modelo predictivo utilizado, denominado AGMEMOD y desarrollado en conjunto con la Universidad de Wageningen (Países Bajos), prevé un aumento de la superficie agrícola de 34 a casi 38 millones de hectáreas, sumando unos 3,4 millones más. No se trata de avanzar sobre áreas naturales o bosques, sino de optimizar la tierra disponible para cultivos.
Una problemática recurrente que limita la eficiencia logística son las condiciones de la red vial. Por ejemplo, la ruta nacional 33, que conecta el Gran Rosario con los puertos bonaerenses de Bahía Blanca y Quequén, presenta sectores muy deteriorados. Este camino es vital para la salida de granos y la integración del sistema portuario.
Desde el Gobierno de Santa Fe se ha tomado financiamiento para mejorar nodos portuarios y rutas provinciales, pero en Buenos Aires la situación es menos clara. Se espera que próximamente se liciten concesiones para obras públicas y peajes que mejoren estas vías.
En el ámbito ferroviario, se mantiene el sistema de “Open Access” para permitir el paso de diferentes operadores en las vías concesionadas, pero las licitaciones y rehabilitaciones aún están pendientes. El Estado analiza qué tramos del Belgrano Cargas y otros ramales privatizar o mejorar primero.
La Hidrovía Paraná-Paraguay es la arteria principal para la salida de granos por vía fluvial desde la región productora hasta el Atlántico. Actualmente, el calado de 34 pies limita la carga efectiva de los barcos y encarece el flete. La BCR insiste en aumentar el calado a 40 pies para mejorar la competitividad.
El proceso de concesión y regulación del dragado y balizamiento avanza con mesas de diálogo entre el Gobierno, entidades públicas y privadas, pero el plazo para la profundización y el mantenimiento regular será clave para evitar pérdidas logísticas millonarias.
El análisis de la Bolsa de Comercio de Rosario es claro: si se combinan políticas económicas favorables, inversión en infraestructura vial, ferroviaria y fluvial, y la adopción de tecnología, Argentina no solo podrá duplicar la producción de granos, sino también potenciar su rol en el mercado internacional.
Este escenario plantea una fuerte apuesta al crecimiento sostenible, generando empleo y divisas, y mejorando la rentabilidad de los productores en un contexto mundial competitivo.