Por Agroempresario.com
El sector energético argentino recibió una mala señal del escenario internacional. En una reunión virtual, la OPEP+ resolvió aumentar en 137.000 barriles diarios la producción de crudo a partir del 1 de octubre, lo que anticipa mayor presión bajista sobre los precios globales.
La noticia llega en un momento clave: en Buenos Aires, comienza este lunes el Argentina Oil & Gas 2025 (AOG 2025), el evento más importante del sector hidrocarburífero del país, con más de 400 empresas expositoras, presencia de delegaciones internacionales y expectativas de inversión vinculadas a Vaca Muerta y a los proyectos de exportación.
El acuerdo alcanzado incluye a ocho países, aunque sólo Arabia Saudita, Irak y Emiratos Árabes Unidos tienen margen real para incrementar la oferta. Por eso, el aumento efectivo podría ser de apenas 60.000 barriles diarios, según estimaciones de consultoras internacionales.
Más allá del volumen, el mensaje es claro: la OPEP busca priorizar su cuota de mercado aunque eso implique precios más bajos. El analista Jorge León, de Rystad Energy, explicó que la medida se interpreta como un giro en la estrategia, al revertir antes de lo previsto los recortes de producción aplicados en los últimos años.
El viernes previo a la decisión, los mercados ya habían reaccionado. El crudo Brent, de referencia en la Argentina, cayó un 2,2%, hasta USD 65,5 por barril, mientras que el WTI estadounidense retrocedió 2,5%, a USD 61,9.
Las razones fueron múltiples: expectativas de mayor oferta, aumento inesperado de reservas en EEUU y nuevos suministros desde Guyana y Brasil. Además, la desaceleración de la economía norteamericana refuerza la percepción de un posible exceso de crudo hacia fin de año.
Para la Argentina, que en julio alcanzó una producción de 811.000 barriles diarios, la más alta desde 1999, un escenario de precios bajistas resulta problemático. El objetivo de la industria es superar el récord histórico de 858.000 barriles diarios y avanzar en la exportación.
El presidente del Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG), Ernesto López Anadón, destacó recientemente que la meta del sector es alcanzar entre 1 y 1,5 millones de barriles diarios, algo que requiere inversión sostenida y precios internacionales firmes.
En este contexto, el inicio de AOG 2025 cobra mayor relevancia. El evento se desarrollará del 8 al 11 de septiembre en el predio de la Sociedad Rural Argentina, en Palermo. Participarán provincias productoras como Neuquén, Río Negro, Mendoza, Santa Cruz, Chubut, Buenos Aires y Santa Fe, junto a delegaciones de EEUU, China, Brasil, Alemania, Canadá, España, Taiwán y Chile.
El programa incluye el Encuentro de CEOs, donde disertarán Ricardo Markous (Tecpetrol), Sergio Mengoni (TotalEnergies) y cerrará Horacio Marín, presidente y CEO de YPF. Además, se realizará el 5° Congreso Latinoamericano de Perforación, Terminación e Intervención de Pozos y se presentará un estudio de Daniel Dreizzen, de Aleph Energy, sobre el aporte de divisas del sector.
La formación de Vaca Muerta es el corazón del desarrollo petrolero argentino. Actualmente produce más de 500.000 barriles diarios, lo que la convierte en la principal fuente de crecimiento de la industria.
Según la Energy Information Administration (EIA) de EEUU, Argentina ocupa el segundo lugar mundial en recursos técnicamente recuperables de shale gas y el cuarto en shale oil, con 27.000 millones de barriles de petróleo y 802 billones de pies cúbicos de gas.
El potencial de exportación es enorme, pero depende de que los precios internacionales se mantengan por encima de los USD 45 por barril, nivel considerado como umbral de rentabilidad.
El desafío para la industria local será sostener la inversión en un contexto de precios internacionales volátiles. Un petróleo más barato puede limitar la rentabilidad de los proyectos, pero también abrir oportunidades de posicionamiento competitivo si el país logra reducir costos logísticos y ampliar infraestructura de transporte y exportación.
El gasoducto Néstor Kirchner, los proyectos de ampliación de oleoductos hacia Chile y la construcción de nuevas plantas de GNL son piezas centrales para garantizar que los excedentes de Vaca Muerta lleguen a los mercados internacionales.
La estatal YPF, bajo la conducción de Horacio Marín, busca consolidar un modelo de mayor eficiencia y expansión exportadora. Al mismo tiempo, compañías privadas como Tecpetrol, Pan American Energy, Vista Energy y TotalEnergies apuestan fuerte a nuevos proyectos de desarrollo.
La expectativa está puesta en que el AOG 2025 sirva como vidriera para cerrar acuerdos de inversión y alianzas internacionales que permitan acelerar el crecimiento del sector pese al contexto global adverso.
La decisión de la OPEP de aumentar la producción envía una señal clara: la prioridad está en mantener cuota de mercado, aunque eso implique presionar los precios a la baja. Para Argentina, en plena expansión de su producción petrolera, es una noticia que genera incertidumbre.
El desafío será aprovechar el impulso de Vaca Muerta y los recursos no convencionales para consolidar un sendero de exportación. El AOG 2025 llega en el momento justo para mostrar la fortaleza del sector, atraer inversiones y planificar un futuro donde la Argentina pueda posicionarse como un jugador clave en el mapa energético global.