El Gobierno nacional oficializó el marco regulatorio del Sistema Nacional de Identificación Electrónica de Animales, que alcanzará a todas las categorías de ganado bovino, bubalino y cérvido del país. La medida, publicada en el Boletín Oficial, define el esquema que comenzará a regir el 1° de enero de 2026, luego de varios meses de debate y postergaciones dentro del sector ganadero.
A partir de esa fecha, ningún ternero o ternera podrá ser movilizado ni permanecer en su establecimiento de origen después del destete sin contar con un dispositivo electrónico de identificación individual.
La resolución, firmada por María Beatriz Giraudo, presidenta del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), detalla que cada animal será identificado con un binomio compuesto por una tarjeta visual y un dispositivo electrónico RFID, que podrá presentarse como botón, bolo o transpondedor inyectable.
El objetivo principal del sistema es garantizar la trazabilidad completa de los animales desde el nacimiento hasta la faena, fortaleciendo los controles sanitarios, la transparencia comercial y la competitividad de la carne argentina en los mercados internacionales.
El productor será el responsable de aplicar los dispositivos oficiales en el destete o antes del primer movimiento y de registrar los datos en el sistema SIGSA, incluyendo sexo, raza y fecha de nacimiento.
Desde diciembre de 2025, quedará prohibida la venta de dispositivos exclusivamente visuales, marcando la transición definitiva hacia la identificación electrónica. En caso de re-identificación, el SENASA deberá ser notificado, manteniendo o anulando la trazabilidad según corresponda.
Los remates feria, eventos concentradores y frigoríficos deberán leer y registrar los números de identificación en los documentos de tránsito electrónico (DT-e). En los establecimientos de faena, los dispositivos deberán ser recuperados, desactivados y destruidos para impedir su ingreso a la cadena alimentaria.
El SENASA será el organismo encargado de fiscalizar el cumplimiento de la norma y aplicar sanciones en caso de incumplimientos, según lo establecido por la Ley 27.233. Además, se prevén convenios con entes sanitarios locales para acompañar la implementación y control en todo el territorio nacional.
Durante el período de transición, que se extenderá hasta diciembre de 2025, convivirán los sistemas visual y electrónico. Sin embargo, desde 2026, la identificación electrónica será el único método válido en Argentina, consolidando un paso clave hacia la modernización del sistema ganadero.