l ingeniero agrónomo Andrés Grasso, analiza las razones del aumento en los rendimientos de las últimas campañas. De acuerdo a los estudios realizados por Fertlizar AC., el aumento de las rindes en los cultivos se debe a un manejo integral de las herramientas de diagnóstico, claves para lograr una mayor productividad.
El éxito de las últimas campañas de trigo está asociado a las estrategias de nutrición. Los rendimientos de casi todos los cultivos en la región pampeana son hasta un 20% superiores que los que se alcanzan con las prácticas frecuentes de fertilización. Para el ingeniero Andrés Grasso, la reducción en las brechas de producción se debe, en gran parte, a un aumento en la demanda de nutrientes al mejorar los genotipos y prácticas de manejo como también por cambios en los suelos: “Debido a una mejora en los ajustes de las dosis de nitrógeno las brechas de producción entre el manejo actual y las estrategias de nutrición de alta producción fueron de 214 a 2095 kilogramos/hectárea para soja, maíz, girasol, cebada y trigo”, explica el ingeniero.
Teniendo en cuenta que la proteína se construye con nitrógeno, para definir las dosis el experto recomienda ejecutar un buen diagnóstico, análisis del suelo y expectativas de alta producción: “Es importante definir cuánto hay en los suelos y qué esperamos en cuanto a su demanda (rendimientos alcanzables) para que este nutriente se transforme en limitante de la producción o de su calidad”, argumenta Grasso. En esta línea, Grasso sugiere que la fertilización nitrogenada éste acompañada con aportes balanceados con fósforo y azufre, de forma tal que estos no sean limitantes o reduzcan la eficiencia productiva.
Respecto a la proyección para la próxima campaña de trigo, se esperan relaciones entre el trigo/urea del 3% y para el trigo/fosfato monoamónico del 10%, ambas más ventajosas que en la campaña pasada: “Los aprendizajes de campañas anteriores y las condiciones actuales de mercado refuerzan el valor de sumar el manejo integral de la fertilización aspirando a planteos de cultivos de alta producción e integrando herramientas de diagnóstico”, concluye el especialista.