El Marine Stewardship Council (MSC) otorgó la Certificación a la pesquería de la especie Centolla (Lithodes santolla) en Argentina, específicamente para el Área Central de manejo, lo que constituye un gran reconocimiento en diversos aspectos, entre ellos a las tareas desarrolladas desde el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP).
Esta certificación emite un ecoetiquetado que permite a los consumidores elegir productos pesqueros provenientes de una pesca sustentable, salvaje (de mar y no cultivo) y amigable con el medioambiente. Para ello, fue fundamental el rol del INIDEP y el trabajo colectivo realizado desde el inicio de esta pesquería con diferentes sectores. De esta manera, desde el 2004 se procuró la toma constante de información por parte de los observadores a bordo, el análisis continuo de esta información por parte de los científicos, la gestión de las autoridades de aplicación y la colaboración de las empresas pesqueras.
La centolla es una especie de cangrejo que habita nuestros mares asociada a aguas frías, tiene un alto valor comercial (aproximadamente 18.000 USD/tonelada) y es considerada un producto premium.
Respecto a las cuestiones del manejo pesquero se destaca la pesca exclusiva de machos adultos, la devolución al mar con vida del resto de los ejemplares, la aplicación de vedas para proteger las épocas más vulnerables del recurso, así como el establecimiento de un cupo anual. A fin de conocer el estado del recurso, se realiza un monitoreo continuo en las mareas comerciales por medio de los asistentes a la investigación pesquera, así como también son necesarias una vez al año las campañas de evaluación del recurso. Es a partir de estas campañas que se obtiene la información para estimar la biomasa de centolla, es decir de la cantidad de ejemplares que podría ser pescada de manera sustentable, y el seguimiento de otros indicadores biológicos y pesqueros del estado del recurso.
Si bien la distribución de centolla abarca gran parte de la plataforma argentina, la certificación refiere al Área Central de manejo, la cual incluye tanto aguas del Golfo San Jorge (jurisdicción de Santa Cruz y Chubut) como aguas de jurisdicción nacional.
La pesca de este recurso se realiza con líneas de trampas, un arte de pesca selectivo y de bajo impacto sobre el ambiente en comparación con las redes de arrastre. En los buques centolleros congeladores se procesa a bordo la captura que está integrada mayormente por centollas, dada la baja captura de otras especies o fauna acompañante. Esta pesca amigable es consecuencia del uso de una trampa estandarizada que entre sus principales características incluye anillos para el escape de juveniles y hembras de centolla y la incorporación de un paño de inactivación para evitar la pesca fantasma.
La responsable del Programa Pesquería de Crustáceos Bentónicos del INIDEP, Dra. Carla Firpo, consideró que “la certificación es un reconocimiento al trabajo que hacemos desde el instituto en pos de que la explotación de centolla sea sustentable abogando por llevar adelante un enfoque ecosistémico”.
Considerando que desde el INIDEP se desprendan las investigaciones asociadas a dos de los tres ítems evaluados bajo los estándares del MSC (el estado del recurso y el impacto de la pesquería en el ecosistema marino), el Instituto posiciona sus contribuciones científicas al nivel del estándar internacional. Cabe mencionar que la certificación del MSC cumple con los requisitos de mejores prácticas establecidos tanto por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) como por ISEAL, la asociación mundial para estándares de sostenibilidad.
“A través de la certificación también se fortalece el trabajo conjunto que se viene desarrollando con otras instituciones de investigación y promueve la generación de nuevos proyectos. También afianza nuestro papel como asesores de las autoridades de aplicación tanto nacional como provinciales y el vínculo con las empresas que se encuentra enmarcado en convenios específicos”, afirmó Firpo.
INIDEP