Por Agroempresario.com 

En una entrevista exclusiva, Agroempresario.com conversó con  Eduardo D Anna, el director de la Agencia Calidad San Juan sobre los principales ejes y avances en materia de acompañamiento financiero a los emprendedores y pequeños empresarios sanjuaninos. 

¿Cuándo surge la Agencia Calidad San Juan? 

La Agencia Calidad nació a través de un programa BID en 2007-2008 y se financiaba principalmente para mejorar las capacidades empresariales. Se trató de la primera agencia mixta donde sus accionistas son el 48% el Estado y el 52% privados, por ser una sociedad mixta se rige por la Ley Privada. 

La agencia surge para fortalecer las 14 cadenas de valor priorizadas en ese momento en la provincia. Cuando nosotros llegamos a la función en 2016 nos propusimos cambiar. Si bien el objetivo de la agencia siempre fue el de fortalecer las cadenas de valor, la idea fue buscar financiamiento en programas de Gobierno de San Juan y trabajar con el núcleo más débil o el menos probable para acceder a los bancos: emprendedores y primeros eslabones de las Mipymes carentes de capacidad crediticia. 

¿Cómo fueron las primeras iniciativas? 

Formamos un área para poder buscar otras opciones de crédito, que sean créditos pequeños para capital de trabajo o compra de bienes respaldados por garantía de cheque propio o de terceros (de la bodega). La primera “prueba de fuego'' fue en 2016 con la cosecha de acarreo. Dentro de las cadenas de valor de San Juan, la actividad vitícola es una de las principales actividades con productores mayores de edad, con un promedio 69 años y fincas menores a 30 hectáreas. 

Se trataba de un productor que no estaba en condiciones de solicitar un crédito, sin capacidad crediticia ni cultura financiera. En el período 2016-2020 tuvimos una cobranza del 100% de los cheques entregados. Con esto pudimos demostrar que a todo productor que se lo ayuda y se generan herramientas para que pueda trabajar, cumple.

¿Cuáles fueron los avances de la gestión?

Desde ahí comenzamos a diseñar otro tipo de herramientas para llegar a emprendedores a través de la incubadora de perfil innovador que funciona en la Agencia. También hacemos el scouting de proyectos que no sean innovadores.

Entre 2016-2018 seguimos con una serie de scouting para emprendedores provinciales y en 2019 realizamos la primera experiencia con fondos privados, donde una minera y la provincia pusieron fondos para hacer el primer scouting público-privado. 

Este año ya generamos el primer “Fondo ángel'' en el que inversores privados van a invertir después que un emprendedor privado pasó por un proceso de incubación y ya tiene el producto mínimo viable para salir a la venta. El Estado efectúa el primer aporte inicial para que se pueda generar el producto y después buscamos algún actor de la actividad privada con aportes ángeles para que invierta en los emprendedores. Es una experiencia nueva que sería la primera en la provincia; se está firmando el contrato entre un emprendedor y este fondo de capital ángel. 

¿Cómo definiría los principales ejes de la Agencia? 

La Agencia tiene varias verticales, una es el apalancamiento a Mipymes que están trabajando y necesitan capital de trabajo. Otra de las verticales es todo lo relacionado al camino emprendedor, no sólo con la incubadora sino también con capacitaciones. Por otro lado, atender a todos los programas nacionales que llegan para emprendedores o que necesiten una incubadora para poder presentarse en los programas nacionales. Otra línea de trabajo es poder acercar financiamiento de créditos fiscales en capacitación para empresas y otro fundamentalmente es donde haya una persona con una idea o proyecto y no pueda acceder al crédito bancario nosotros lo podamos ayudar. 

¿Qué significan los emprendedores para San Juan?

En el período 2015-2019 se destruyeron más de 50 mil empresas, después llegó la pandemia. Venimos con un déficit de mejora en cantidad de empresas registradas en AFIP. El emprendedor cuando emprende está en capacidad informal y cuando se le hace el primer reembolso pasa a ser formal a través de monotributo o SAS. Para la provincia significa mucho porque está generando una empresa que posiblemente tome empleados por un lado y si no es autoempleo. 

San Juan tiene como eje fundamental y finalidad proteger el empleo privado. Con la incubadora, el primer punto de contacto es el emprendedor. Entonces es a quien tenemos que fortalecer porque el día de mañana ese déficit o tendencia negativa en cantidad de empresas inscriptas en la AFIP la nivelemos positiva. 

¿Qué programas existen actualmente en la Agencia?

Tenemos una línea de crédito para todo lo que es capital de trabajo, hasta $1 millón con garantía de cheque y hasta $2 millones si está acompañado con un aval a sola firma de alguna compañía de garantía como Garantía San Juan, una empresa creada por la provincia para garantizar créditos. Tenemos una línea de scouting para innovación con la que vamos a financiar 20 proyectos que van desde $800 mil y $1.2 millones según el proyecto.

Por otro lado, impulsamos un crédito de compra para bienes de capital a 3 años de hasta $2 millones, siempre pensando en micro emprendedores o empresas que estén facturando. En estos momentos estamos lanzando nuevas líneas para compra de mangueras y elementos de riego para mejora de riego por goteo o manga para optimizar el índice de mejora hídrica. 

¿Cuáles son los planes a mediano y largo plazo?

Estamos trabajando fuertemente con emprendedores provenientes de la economía del conocimiento, uno de los aspectos claves para generar empleos de alta calidad. En este sentido, articulamos con la Universidad Nacional de San Juan y las empresas, para que estudiantes y graduados puedan dar algún tipo de solución a través del emprendedurismo, lo que llamamos “innovación abierta''. Para esto utilizamos herramientas ágiles de empresas tecnológicas que se pueden transpolar con éxito a empresas y actividades tradicionales. De esta manera estamos agregando valor tratando de combinar experiencias, además de créditos para comercios e industrias.