La carne vacuna cerró diciembre pasado sin variaciones en sus precios y finalizó 2022 con una suba del 42,4%, según un relevamiento del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva).
Se trata de menos de la mitad que la inflación estimada para todo el año pasado [hoy se conocerá el dato oficial], de en torno del 95%. Además, la carne vacuna subió menos que el pollo y el pechito de cerdo, ya que estos lo hicieron un 97,9% y un 61,4%, respectivamente, para todo 2022. Puntualmente en diciembre último, el pollo se incrementó un 3,3% y el pechito de cerdo lo hizo un 1,2%.
Según el relevamiento, el precio promedio de la carne vacuna se ubicó en $1220 por kilo. En tanto, fue de $426,3 para el pollo y $957,8 para el caso del pechito de cerdo.
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Varios factores se conjugaron para que la carne vacuna tuviera un incremento muy por debajo de la inflación general. Entre otros, una mayor producción, la sequía, que obligó a muchos productores a adelantar ventas de ganado y un contexto internacional con precios a la baja en la segunda mitad del año que también repercutió sobre los volúmenes colocados en el exterior. El Gobierno tiene vedadas las ventas al exterior de siete cortes populares [asado con o sin hueso, falda, matambre, tapa de asado, nalga, paleta y vacío] y, además, ejerce una suerte de administración no escrita de las ventas al exterior. También influyó la pérdida de poder adquisitivo por la inflación en general. Del lado de los productores ganaderos, que son los que inician el circuito hasta que llega la carne al consumidor, hoy estos actores enfrentan un escenario de precios bajos que también quedaron relegados con respecto a la inflación. En la cadena, los feedlots, que realizan el engorde a corral, se encuentran con pérdidas millonarias.
Para Capital Federal y el Gran Buenos Aires, el Ipcva siguió de manera telefónica la situación de los precios en 80 carnicerías. En tanto, el relevamiento en supermercados fue presencial en 40 puntos.
Entre otros puntos, el trabajo señaló que los precios tuvieron una baja del 1,4% en diciembre pasado en los puntos de venta de barrios de nivel socioeconómico alto. En cambio, en los lugares que comercializan en el nivel socioeconómico medio se incrementaron un +1,7%. Por otra parte, subieron 0,3% en aquellos para el nivel socioeconómico bajo.
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Dentro del AMBA también hubo un movimiento dispar en cuanto a los precios. El Ipcva lo señaló así: “El comportamiento de los precios de la carne vacuna durante el mes de diciembre de 2022 mostraron alzas en zonza oeste del GBA (+1%) y zona sur del GBA (1,6%). Mientras que en Capital Federal se dieron bajas del -1,7% y del -0,7% en zona norte del GBA”.
En este contexto, los precios en diciembre pasado aumentaron en las carnicerías y bajaron en los supermercados relevados. Para el cierre de 2022 la situación fue inversa, ya que el acumulado de todo el año mostró mayores incrementos en los supermercados antes que en las carnicerías.
“El precio de la carne vacuna en las carnicerías exhibió alzas del +1,2% con respecto al mes anterior, y +40,4% con respecto al mismo mes del 2021. Por otro lado, el precio promedio de la carne vacuna en supermercados mostró una caída del -2,6% con respecto al mes anterior y un incremento del +47,4% con respecto a diciembre 2021″, señaló.
El trabajo también hizo una comparación por productos, mostrando cuáles tuvieron los mayores incrementos el mes pasado. “Las principales alzas en precios promedio durante el mes de diciembre 2022 se dieron en el vacío (+3,5%) y asado (+2,5%). Mientras que las principales bajas se dieron en la picada especial (-4,9%) y picada común (-6,1%) en el período analizado”, apuntó.
La Nación
