La emergencia agrícola en Catamarca debido a la plaga de chicharrita del maíz genera un impacto devastador en la producción local. Con miles de hectáreas afectadas en la zona núcleo del departamento Santa Rosa, los productores de Bañado de Ovanta y Los Altos, se enfrentan a pérdidas significativas. Además localidades como El Alto, Singuil, Paclín, Aconquija, también se vieron afectadas. La pérdida estimada representa un duro golpe para la producción agrícola de la provincia.
Ante esta situación crítica, el Ministerio de Inclusión Digital y Sistemas Productivos, a cargo de Juan Cruz Miranda, en un trabajo interinstitucional con el Instituto Nacional de Tecnología agropecuaria (INTA), municipios afectados y especialistas, buscan soluciones urgentes para mitigar el daño y recuperarse de esta crisis. Se están realizando relevamientos exhaustivos que arrojan hasta un 90% de afectación y el amplio abanico de niveles de severidad. En las últimas semanas, los reportes de productores comenzaron a aumentar y se estima que hasta 30.000 hectáreas están siendo afectadas.
La pérdida estimada se acerca a los 40 millones de dólares que representan un duro golpe para la produccion agrícola de la provincia, este escenario obliga a buscar soluciones urgentes para mitigar el daño.
El Spiroplasma kunkelli, es una enfermedad típica, pero que no siempre se presenta de la misma manera. La bacteria transmitida por el insecto chicharrita Dalbulus maidis causa el achaparramiento del maíz y provoca síntomas graves como la presencia de multiespigas infértiles que no producen prácticamente grano y la prematura muerte de las plantas.
Juan Cruz Miranda destacó que estarán alertas y avanzarán en los relevamientos en el invierno para verificar la supervivencia del vector. “En este contexto, es crucial que las autoridades nacionales, provinciales y municipales, junto a los agricultores y otros actores relevantes del sector trabajemos en conjunto y de manera coordinada para superar esta crisis”, afirmó.