El impacto fiscal de eliminar retenciones: un estudio proyecta alternativas para el Estado

Por Agroempresario.com

CÓRDOBA. El presidente Javier Milei prometió eliminar las retenciones al campo tras la eliminación del impuesto PAIS. Un estudio de la organización Fundar indica que, si se cumpliera esta promesa, el Estado podría recuperar el 58,9% de la pérdida de recaudación. Esto se lograría a través del aumento de precios internos, mayor ingreso de los productores y un incremento en la producción agrícola debido a la desgravación.

Sin embargo, la recuperación no se distribuiría equitativamente entre los niveles de gobierno. Las provincias resultarían más beneficiadas debido a la expansión de las bases imponibles de impuestos nacionales coparticipables y de cargas locales.

El informe titulado “Discutir los derechos de exportación: hacia un nuevo marco fiscal para el agro”, elaborado por Tomás Allan, Kevin Corfield, Juan O’Farrell y Carlos Freytes, sugiere que la reducción de retenciones debería llevar a una ampliación automática de la base imponible de otros impuestos. Proponen reemplazar los derechos de exportación con un fortalecimiento en la recaudación de impuestos sobre ingresos netos y propiedades, como Ganancias, Inmobiliario Rural, Bienes Personales y Renta Extraordinaria de los recursos naturales. Señalan que la temporalidad y forma de implementación de estas medidas son cruciales, y desaconsejan una reducción inmediata de las retenciones, especialmente si se produce una devaluación.

El estudio también sugiere que una gradualidad en las reformas permitiría ajustes necesarios y adaptación al nuevo marco regulatorio. Proponen que una ley del Congreso sería la mejor forma de cumplir con las disposiciones constitucionales y brindar previsibilidad a la inversión privada.

Los autores destacan que un sistema mixto de tributos sobre activos patrimoniales fijos e ingresos netos tendría ventajas sobre el esquema actual en términos de eficiencia económica y equidad intrasectorial. Plantean que para fortalecer estas cargas es necesario reducir retenciones, de lo contrario, resultaría contraproducente en términos productivos.

Otro aspecto analizado es que las retenciones promueven la diversificación productiva y la agregación de valor. Eliminarlas favorecería al monocultivo de soja, por lo que sugieren mantener una tasa residual para asegurar un diferencial con el maíz e incentivar la rotación de cultivos. También proponen diferenciales entre productos con distintos grados de elaboración dentro del complejo oleaginoso para incentivar el procesamiento del poroto de soja y sostener la diversificación alcanzada.

Fundar también sugiere la creación de un fondo de desarrollo para financiar inversiones en investigación y desarrollo agrícola, y la prestación de bienes y servicios generales como infraestructura rural y sanidad vegetal, para aumentar la productividad sectorial.

El informe advierte que la reforma fiscal para el sector agrícola requiere una adecuada calibración técnica de los instrumentos y acuerdos fiscales multinivel para establecer nuevos arreglos sobre la distribución de ingresos y gastos públicos entre la Nación y las provincias. Señalan que actualmente la Nación tiene mayores incentivos para sostener las retenciones, ya que proporcionan una fuente de ingresos de fácil recaudación que no coparticipa. Las provincias productoras, en cambio, se beneficiarían en el nivel de actividad y recaudación local con su eliminación.

En este contexto, los autores subrayan que cualquier iniciativa de reducción de retenciones debería prever una compensación para el Estado nacional, el principal actor perjudicado.