Auge petrolero: Argentina registra un aumento del 60% en exportaciones y transforma su salanza energética

Por Agroempresario.com

En un giro sorprendente para la economía argentina, el primer semestre de 2024 ha visto un impresionante aumento del 60% en las exportaciones de petróleo, un signo claro del auge en el sector energético del país. Según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), las exportaciones de petróleo alcanzaron un total de US$2534 millones, un aumento significativo en comparación con los US$1581 millones exportados en el mismo período de 2023.

Este notable crecimiento no solo refleja el impacto positivo del sector energético en la economía argentina, sino que también contribuye a una transformación en la balanza comercial del país. En tan solo dos años, Argentina ha pasado de un déficit de US$4000 millones en 2022 a un pronóstico de superávit de US$6000 millones para 2024, lo que representa una mejora de US$10.000 millones en la balanza comercial energética.

El aumento en las exportaciones de petróleo se produce en un contexto de disminución en las importaciones de gas. Durante el primer semestre de 2024, las importaciones de combustibles y lubricantes cayeron un 55,1%, descendiendo de US$4587 millones en 2023 a US$2060 millones. Este cambio se debe en parte a la sustitución del gas importado por producción local, así como a la reducción en los precios internacionales y la entrada en funcionamiento del gasoducto Néstor Kirchner.

Además, el informe revela una reducción del 67,1% en las importaciones de gas natural licuado (GNL) en junio, con un descenso de US$521 millones en 2023 a US$171 millones en 2024. Las importaciones de gas natural también disminuyeron un 35,3%, de US$119 millones a US$77 millones, gracias a la caída en los precios internacionales y la operación del gasoducto.

El sector energético argentino ha registrado un aumento del 26,8% en el valor total de las exportaciones de combustibles y energía, impulsado por un incremento del 29,4% en las cantidades exportadas, que compensó una leve caída del 2% en los precios. En contraste, las importaciones de combustibles y lubricantes disminuyeron tanto en términos de valor como de cantidad.

El crecimiento del sector energético argentino está vinculado al desarrollo de Vaca Muerta, que ha permitido una producción diaria cercana a los 700.000 barriles de petróleo, de los cuales 367.000 provienen de esta formación. La reciente duplicación de la capacidad del oleoducto que conecta Vaca Muerta con Buenos Aires, la reactivación del oleoducto Trasandino y la construcción de un nuevo oleoducto hacia el puerto de Punta Colorada han sido factores clave en el aumento de las exportaciones.

Alejandro Monteiro, exministro de Energía de Neuquén, y el actual secretario ejecutivo de la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (Ofephi), destacan que la expansión en la capacidad de transporte ha facilitado el incremento en las exportaciones de crudo y gas, al tiempo que se ha reducido el consumo interno de combustibles debido a la desaceleración económica.

Este crecimiento en el sector energético no solo mejora la balanza comercial de Argentina, sino que también posiciona al país como un jugador importante en el mercado global de petróleo y gas, subrayando el potencial continuo de Vaca Muerta en la economía argentina.