Por Agroempresario.com

La apertura de una tienda Starbucks en un barrio donde no existen otras cafeterías puede generar un impacto significativo en la economía local. Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Columbia, Estados Unidos, ha demostrado que la llegada de una nueva sucursal de Starbucks puede llevar a la creación de entre 1,1 y 3,5 nuevas empresas al año en el mismo barrio durante los siguientes siete años. Según los autores del estudio, esto se debe al rol que juegan las cafeterías como "tercer lugar" -ni hogar ni trabajo- donde las personas pueden reunirse sin un propósito específico, facilitando la creación y movilización de redes de contactos entre emprendedores.

Los investigadores Choi Jinkyong, Jorge Guzmán y Mario Small, de la Universidad de Columbia, descubrieron que la apertura de una nueva tienda Starbucks en un barrio sin cafeterías previas puede ser un catalizador para el emprendimiento local. Los autores del estudio señalaron que estos establecimientos ayudan a los emprendedores a crear y movilizar redes de contactos, fomentando así la innovación y la creación de nuevas empresas.

Para asegurar que los resultados no estuvieran influenciados por una estrategia premeditada de la cadena para elegir barrios con potencial emprendedor, los investigadores se basaron en dos fuentes de aleatoriedad: la oposición vecinal y el acuerdo con el exjugador de baloncesto Earvin "Magic" Johnson. Compararon barrios donde se abrieron nuevas tiendas Starbucks con aquellos donde la cadena no pudo expandirse debido a objeciones municipales. Además, analizaron barrios que se beneficiaron del acuerdo de Starbucks con Johnson, cuyo objetivo era llevar la cadena a barrios desfavorecidos, fuera de sus destinos habituales.

Los investigadores también encontraron que los beneficios económicos son específicos del modelo de negocio de Starbucks. Otras cadenas de café, como Dunkin' Donuts, que no suelen tener mucho espacio para sentarse, no generan los mismos beneficios. Sin embargo, Caribou Coffee, una cadena similar a Starbucks, mostró beneficios comparables en las áreas donde se estableció.

Aunque el estudio aún no ha sido revisado por pares, sus conclusiones son coherentes con ejemplos históricos. En el siglo XVIII, las cafeterías de Londres eran conocidas como "universidades de un centavo", donde por el precio de una taza de café, se podía acceder a las mentes más brillantes de la época. Ejemplos notables incluyen Lloyd's of London, que comenzó en una cafetería, y la bolsa de valores de Londres, que tiene un origen similar.

A pesar del éxito de Starbucks en fomentar el emprendimiento en Estados Unidos, la cadena ha encontrado dificultades para replicar este efecto en Europa, posiblemente debido a su naturaleza corporativa. Esto plantea un desafío para los europeos que podrían considerar cambiar su espresso tradicional por un "Frappuccino algodón de azúcar".