La magia de la infancia en cada mordisco: Facundo Elvadín transforma recuerdos en éxito gastronómico

Por Agroempresario.com

En el corazón del barrio de Palermo, Facundo Elvadín ha dado vida a un sueño que fusiona recuerdos de infancia con innovación gastronómica. Su nuevo proyecto, "Merienda", no solo ofrece una experiencia culinaria única, sino que también rinde homenaje a las tardes pasadas en la plazoleta William Morris, un lugar que marcó su niñez. Esta cafetería y restaurante se ha convertido en un punto de encuentro para aquellos que buscan revivir las tradiciones argentinas a través de un menú cuidadosamente elaborado.

La inspiración para "Merienda" proviene de las memorias de Facundo, quien solía disfrutar de tardes llenas de juegos en la plazoleta y meriendas con su familia. “Recuerdo las tardes con mis abuelos y tíos, rodeado de delicias caseras como la pasta frola y las galletitas de colores,” confiesa Elvadín en una entrevista publicada en La Nación. “Este proyecto es una forma de revivir esos momentos especiales y ofrecer a otros la misma calidez y sabor que experimenté de niño”.

Elvadín, quien antes de emprender en gastronomía era abogado, decidió cambiar de rumbo tras años de trabajo en el ámbito legal. Con una maestría en Administración de Justicia y una carrera en la Justicia Penal, Facundo encontró su verdadera pasión en la cocina. En 2014, se asoció con su tío para abrir "Santo Bar de Pizzas", seguido de "Palmyra", una cafetería en Colegiales. "Merienda" representa la culminación de su viaje, con un local situado en una esquina especial de Palermo, frente a la plazoleta que tanto significa para él.

La decoración de "Merienda" es una extensión de sus recuerdos infantiles. El espacio está adornado con detalles que evocan su pasado, como sillas inspiradas en las de la escuela y plantas que recuerdan a las de su abuela. Elvadín describe con entusiasmo cómo el diseño del lugar busca capturar la esencia de sus memorias, mientras que la selección

de alimentos se centra en reinterpretar clásicos argentinos con un toque moderno. Entre las ofertas destacan las versiones caseras de galletitas emblemáticas como la Tita, transformada en masa sablé con relleno de limón y baño de chocolate, y la Melba en forma de brownie. También se presentan platos salados tradicionales con innovaciones, como buñuelos de acelga y milanesas con espaguetis.

Elvadín revela que el proceso de creación de las recetas fue exhaustivo. “Probé numerosas versiones de cada galletita, hasta encontrar la combinación perfecta,” señala, añadiendo que “cada semana se convertía en un festín de sabores en busca de la receta ideal” (La Nación). Su compromiso con la calidad y la autenticidad se refleja en cada detalle del menú.

Aunque Facundo ha recibido propuestas para franquiciar "Merienda", prefiere mantener el enfoque en su único local para garantizar una experiencia personalizada y auténtica. “Queremos que cada cliente viva una experiencia memorable, conectando con recuerdos de su propia infancia,” expresa Elvadín. Su objetivo es preservar la esencia de “Merienda” como un lugar único que ofrece más que solo comida; busca ser un refugio de nostalgia y calidez en el vibrante barrio de Palermo.