El arroz, un oasis verde en medio del desierto que viven la mayoría de las economías regionales

Aunque en abril pasado parecía que muchas economías regionales comenzaban a asomar la cabeza, luego de una sucesión de varios meses en que dominaban los escenarios de alerta o crisis, la realidad es que el grueso de las cadenas productivas Argentinas continuó en los meses siguientes en una situación problemática y la tendencia se ratificó en julio.

De acuerdo con el último semáforo mensual de economías regionales elaborado por la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), 16 de las 19 cadenas productivas relevadas están bajo luz amarilla (señales de advertencia) o roja (signos de crisis o directamente en crisis).

Es decir, que apenas hay tres en verde (crecimiento o prosperidad): el arroz, las hortalizas y el tabaco.

De todos modos, podría decirse que el arroz es la única bajo una senda sostenida de crecimiento, ya que lleva cinco meses en esa situación, contra dos de las hortalizas y uno del tabaco.

EL ARROZ, A LA CABEZA DE LAS ECONOMÍAS REGIONALES

“El arroz está en verde por quinto mes consecutivo, ya que continua la recuperación de variables: precios, superficie, producción y exportaciones”, menciona el relevamiento de Coninagro.

Sin embargo, no está exento de frentes de tormenta: “Se comenta la preocupación por el aumento en el costo de la energía para el riego y la poscosecha; es decir, el tratamiento que recibe el grano después que sale del campo”, aclara.

En tanto, “las hortalizas siguen en verde por segundo mes consecutivo, aunque con volatilidad de precios”, agrega el informe.

En cuanto al tabaco, está en verde por primera vez en al menos un año por la recuperación de precios y de las exportaciones.

CÓMO ESTÁ EL RESTO DE LAS ECONOMÍAS REGIONALES

Algodón: se encuentra en amarillo (por segundo mes) principalmente porque ha recuperado producción, pero mantiene precios bajos. Esta actividad está buscando financiar la nueva siembra y la incorporación de tecnología.

Aves: mantiene el amarillo por segundo mes, mayormente por la evolución de los precios mayoristas respecto de la inflación y una ecuación de costos estable. El resto de los indicadores no son muy alentadores. Esta actividad está muy activa buscando abrir nuevos mercados y destinos. Sin embargo, la competencia de Brasil es muy fuerte.

Carne bovina: cambió de naranja a amarillo en este mes. Esta mejora se debe a la suba de precios de las categorías de novillo y ternero (categorías que se toman para el indicador de precios). Sin embargo, el resto de las variables no muestra mejoras significativas. Se aclara que el dato de stock, si bien es rojo, según los especialistas no es tan rojo como se esperaba, con lo que no refleja una tan mala noticia: el número negativo refleja el impacto en el nacimiento de terneros post estrés nutricional de las vacas (y del rodeo en general) por la sequía del año pasado.

Cítricos dulces (naranjas, mandarinas y pomelos): muestra un color rojo, al igual que los últimos cuatro meses. La causa es porque los precios crecen pero a menor ritmo que la inflación, sumado a la suba de los costos de almacenaje y logística. Por el lado de la producción, hay estimaciones negativas por las recientes heladas.

Producción forestal: muestra un color rojo, al igual que los últimos cuatro meses. Pese a la suba de precios internos, los destinos se encuentran con baja demanda: tanto la construcción como la exportación está estancada. Es decir, los precios de referencia (INTA Concordia y colegio de ingenieros de Misiones) pareciera que aún no traccionan.

Granos (trigo, soja, maíz, girasol, cebada y sorgo): sigue en rojo donde hace ya más de un año. Las razones son los bajos precios en pesos y la menor exportación.

Leche: mantiene el rojo, acumulando más 12 meses en este color. Si bien los precios promedio SIGLEA están por arriba de la inflación, los litros producidos por tambo caen significativamente en términos interanuales. La exportación está creciendo en volumen, pero poco en valor. Esta actividad tiene mucha heterogeneidad, con lo que se están observando (a grandes rasgos) dos dinámicas en paralelo: la venta de tambos por baja producción o edad del tambero, costos energéticos y dificultades en la generación de reservas forrajeras; y también de innovación e inversión para superar esta crisis. Parece ser un momento bisagra.

-Mandioca: mantiene el color rojo, ya que muestra precios muy por debajo de la inflación.

-Maní: la producción de maní está por segundo mes consecutivo en amarillo tras varios períodos en verde, ya que los precios se estancaron, al igual que las exportaciones.

-Miel: profundiza el rojo por precios muy bajos, siguen los problemas productivos y muy baja exportación.

-Ovinos: también está en rojo, donde todos los indicadores son negativos, y profundizados por las nevadas que fueron letales para el sector en la Patagonia.

-Peras y manzanas: está en rojo por bajos precios, costos elevados. Comprensa levemente la mejora en las exportaciones.

-Carne porcina: pasó del amarillo el mes pasado a rojo, por el estancamiento significativo de precios que sufrió la principal categoría: el capón.

-Vino y mosto: mantiene el rojo por más de un año, combinando precios por debajo de la inflación, menor consumo interno y menores exportaciones. Se ha recuperado producción respecto de la campaña anterior, pero no llega a compensar. Se comenta la preocupación en el sistema productivo respecto de los altos costos de la electricidad (en los casos donde hay pozo), y también en las bodegas para el estacionamiento y frío, luego de la elaboración.

-Yerba mate: se mantiene el rojo observado, acumulando tres meses. La razón es la baja en los precios al productor (hoja verde, antes del secadero y molino). Se comenta que no hay muchas razones en la actualidad para pensar que este punto se revierta.

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