A pesar de la crisis de la cadena de suministro provocada por la pandemia de COVID-19, el sector sigue lidiando con problemas persistentes, especialmente la amenaza de plagas que podrían devastar la producción global. Edison Agrosciences, una startup estadounidense, surge como un actor clave en esta transición hacia fuentes alternativas, utilizando el girasol como una solución innovadora y sostenible.
El 90% del caucho natural del mundo proviene del sudeste asiático, una región donde los árboles de caucho son clones de semillas exportadas desde América del Sur en el siglo XIX. Esta dependencia plantea un riesgo significativo: los árboles clonales son altamente susceptibles a la enfermedad conocida como blight de hojas de caucho sudamericano (SALB, por sus siglas en inglés). Esta enfermedad fúngica ha arrasado con la producción de caucho en Brasil y, a pesar de las medidas de control y el uso de fungicidas sintéticos, la amenaza persiste sin una solución definitiva.
David Woodburn, CEO de Edison Agrosciences, reconoce la gravedad del problema: “Sabíamos que había un potencial problema con la cadena de suministro de caucho natural. La necesidad de desarrollar medidas de cuarentena contra la enfermedad es urgente”.
Edison Agrosciences ha apostado por los girasoles como una fuente alternativa de caucho natural. Aunque en un principio exploraron la modificación genética para aumentar el contenido de caucho en las plantas, han cambiado su enfoque hacia el mejoramiento genético. “Hemos demostrado que la acumulación de caucho está influenciada por la genética, lo que significa que podemos seleccionar y criar para obtener niveles más altos”, explica Woodburn.
Los girasoles, que contienen naturalmente entre un 1% y un 2% de su peso en caucho, ya se cultivan en aproximadamente 1 millón de acres en Estados Unidos y en muchas otras regiones del mundo. La empresa está trabajando para maximizar la producción de caucho en estas plantas mediante un programa de mejoramiento genético que sigue descubriendo nuevas líneas genéticas para aumentar los niveles de caucho en los girasoles.
Recientemente, Edison Agrosciences recibió una inversión de U$S 600.000, una cifra mayor a la que originalmente habían previsto. Woodburn destaca la eficiencia operativa de la empresa: “Aunque U$S 600.000 puede no ser una gran suma para muchas compañías, para nosotros significa mucho debido a nuestra estructura extremadamente eficiente en términos de capital”.
La financiación permitirá a la empresa escalar su producción y realizar pruebas físicas y mecánicas necesarias para colaborar con socios industriales. También apoyará el continuo desarrollo del programa de mejoramiento de girasoles, buscando obtener niveles más altos de caucho en las plantas
Uno de los mayores retos para Edison Agrosciences es generar demanda para un producto que aborda una necesidad futura. Aunque el blight de hojas de caucho sudamericano aún no ha afectado al sudeste asiático, la industria es consciente de la seriedad del problema.
Para superar esta barrera, Edison Agrosciences está enfocando sus esfuerzos en aplicaciones especializadas que tienen precios más altos y volúmenes más bajos antes de pasar a aplicaciones de caucho en productos de mayor volumen. Además, la sostenibilidad del caucho de girasol podría ser un atractivo adicional para empresas comprometidas con la reducción de su impacto ambiental. El caucho natural del sudeste asiático está asociado con problemas de deforestación, mientras que el caucho sintético derivado de petroquímicos implica procesos energéticos intensivos y residuos peligrosos.
Woodburn señala que grandes compañías de neumáticos como Michelin y Goodyear tienen compromisos públicos para utilizar materiales y procesos sostenibles para 2050. “En la industria del calzado, por ejemplo, podríamos ayudar a reemplazar materiales sintéticos con caucho de girasol, contribuyendo a productos más sostenibles”.
Edison Agrosciences, con su innovadora solución basada en girasoles, no solo ofrece una alternativa viable al caucho natural tradicional, sino que también enfrenta los desafíos ambientales y de cadena de suministro de manera proactiva. A medida que la empresa continúa avanzando en su programa de mejoramiento genético y expandiendo su presencia en el mercado, el caucho de girasol podría convertirse en una pieza clave en la industria del caucho, proporcionando una opción más sostenible y resistente para diversas aplicaciones.
Este enfoque pionero no solo representa una solución a un problema inminente, sino que también abre nuevas oportunidades para la sostenibilidad en una industria crítica para la economía global.
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