Por Agroempresario.com
Un equipo de investigación ha logrado un descubrimiento sorprendente en el Valle de Uco: el roedor tuco-tuco Ctenomys Uco, una especie única en el mundo que solo se había observado en dos ocasiones en la región. Este hallazgo se enmarca dentro de un programa de investigación sobre biodiversidad que involucra a Bodega Argento, el INTA, la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) y el Conicet, iniciado en 2018.
La información fue proporcionada por Bodega Argento, que se dedica a la producción de vinos orgánicos en el país. En este contexto, la empresa lanzó MatrizViva, un programa que busca democratizar el acceso a investigaciones sobre agua, biodiversidad, vid y suelo. A través de este programa, se espera profundizar en la interacción entre los agroecosistemas de la finca.
El descubrimiento del Ctenomys Uco fue reportado en medio de un proyecto que inició con la plantación de una parcela de flores en el viñedo, una estrategia que ha demostrado mejorar la biodiversidad y el control de malezas. Según Cecilia Acosta, Líder de I+D de Grupo Avinea, “iniciamos con dos líneas de investigación: las hormigas y la cobertura vegetal en el interfilar del viñedo. En la actualidad estamos desarrollando 15 nuevos proyectos”.
El programa de investigación ha permitido avances significativos en la salud del suelo y la biodiversidad. “Como resultado, se logró un mayor control de malezas, mejor infiltración del agua y un aumento de la biodiversidad de insectos”, especificaron desde la bodega. En este sentido, el Ctenomys Uco representa un valioso aporte a la riqueza biológica de la región, que podría tener implicaciones importantes para la vitivinicultura orgánica.
Las investigaciones no se limitan solo al Ctenomys Uco, sino que también han abarcado la identificación de especies de mamíferos y micromamíferos en el viñedo. Este estudio, que comenzó en octubre de 2023 junto a investigadores del Iadiza-Conicet, emplea mecanismos como dispositivos de movimiento con registro fotográfico y cajas Sherman para la recolección de datos.
La intención de los investigadores es compartir sus hallazgos y fomentar la participación de la comunidad en esta iniciativa innovadora, que busca destacar la importancia de la biodiversidad en el agroecosistema. Como concluyó Acosta, “creemos que esta innovadora iniciativa de cobertura vegetal continuará generando un impacto positivo en la vitivinicultura sustentable de Argentina”.
Este descubrimiento no solo subraya la riqueza biológica del Valle de Uco, sino que también resalta el potencial de la investigación interdisciplinaria en la promoción de prácticas agrícolas sostenibles. La colaboración entre el sector privado y las instituciones académicas y científicas es fundamental para avanzar en el conocimiento y la conservación de la biodiversidad en la región.