Por Agroempresario.com
El Gobierno de Javier Milei, en su cruzada por redefinir la política exterior y reducir los costos del Estado, ha designado a Gerardo Werthein como nuevo ministro de Relaciones Exteriores, en reemplazo de Diana Mondino. La transición se da en medio de un clima tenso con los diplomáticos de carrera, quienes enfrentan recortes salariales y cierres de sedes en el extranjero.
Según un artículo de Infobae, Werthein, quien se desempeñaba como embajador en los Estados Unidos, llega a la Cancillería con un plan de acción inmediato: reducir el gasto diplomático. Este enfoque incluye el cierre de embajadas y consulados en aquellos países donde los vínculos comerciales son limitados. En su lugar, se instalarán Agencias Nacionales, que continuarán las funciones consulares pero con menos personal y recursos.
La medida, que ya había sido evaluada por Mondino antes de su salida, generó roces con la Asociación Profesional del Servicio Exterior de la Nación (APSEN), que ha criticado la política de recortes impulsada por el Gobierno. La tensión escaló a tal punto que en octubre, la Justicia falló a favor de APSEN y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en un reclamo por el Impuesto a las Ganancias sobre los adicionales que perciben los diplomáticos por servicios en el exterior.
El presidente Milei ha defendido las acciones de su administración. “Quienes no se encuentren en condiciones de asumir los desafíos que depara el rumbo adoptado en defensa de las ideas de la libertad, deberán dar un paso al costado”, escribió en una carta enviada al cuerpo diplomático, citada en el artículo de Infobae. Este mensaje refuerza la intención de Milei de confrontar lo que califica como "privilegios" del sector.
Entre otras reformas, Werthein tiene en mente aplicar recortes a los salarios de los embajadores, quienes, según fuentes oficiales citadas por Infobae, perciben ingresos mensuales entre 15 y 20 mil dólares. Esta propuesta busca alinearse con modelos internacionales de cálculo de costos de vida, como el de Naciones Unidas.
Además, Werthein planea una reorganización interna que implicará el reemplazo de secretarios y subsecretarios nombrados por Mondino, dejando en su cargo únicamente a Nahuel Sotelo, cercano al Vaticano y a Karina Milei.
El desafío inmediato para el nuevo canciller será equilibrar la política de austeridad con las necesidades diplomáticas de un país que busca mantener su presencia internacional de manera eficiente y estratégica.