Por Agroempresario.com
A pesar de los indicadores positivos en la economía durante los últimos meses, el consumo masivo en Argentina sigue sin mostrar una recuperación clara. Las ventas de alimentos, bebidas, productos de higiene y limpieza continúan en niveles bajos, reflejando un panorama complejo para los supermercados. Según datos preliminares de la consultora Scentia, el volumen de ventas en octubre experimentó una caída interanual cercana al 20%, repitiendo la tendencia negativa observada desde principios de año.
Aunque algunos supermercados reportaron un leve repunte en octubre en comparación con septiembre, impulsado por un mayor número de días hábiles, la situación general sigue siendo de estancamiento. La variación en las ventas se explica en parte por la alta base de comparación de 2023, un año marcado por políticas económicas expansivas y el contexto electoral. La estabilidad en las ventas diarias desde abril indica que los consumidores aún enfrentan dificultades para aumentar sus gastos en productos básicos.
Un caso particular es el de La Anónima, cuyo CEO, Nicolás Braun, destacó en el 60° Coloquio de IDEA un crecimiento sostenido desde marzo-abril, con un aumento total de 10 puntos porcentuales hasta octubre. Este resultado es atribuible en parte al impacto positivo del desarrollo económico en la región de Vaca Muerta, donde la cadena tiene una presencia significativa. Sin embargo, este crecimiento no es generalizable al resto del sector, donde los desafíos persisten.
Las cifras de septiembre, publicadas por Scentia, señalaron una contracción interanual del 22,3%, acumulando una caída del 11,9% en los primeros nueve meses del año. Las categorías de productos impulsivos, como golosinas, fueron las más afectadas, con descensos superiores al 30%. Este escenario subraya la preferencia de los consumidores por destinar sus recursos a bienes duraderos y a servicios, reconfigurando sus patrones de gasto.
De cara a 2025, los expertos prevén una recuperación lenta para el consumo masivo, con un crecimiento proyectado de entre 2% y 3%. Las estrategias comerciales y los descuentos en los próximos meses, especialmente durante las Fiestas, serán cruciales para atraer a los consumidores y comenzar a revertir la tendencia. Las comparaciones interanuales a partir de enero favorecerán al gobierno, ya que se medirán contra un trimestre marcado por el inicio de la gestión de Javier Milei y los efectos económicos que trajo consigo.
El sector debe adaptarse a este nuevo contexto, donde la reactivación no será homogénea ni inmediata. Las empresas tendrán que innovar y diversificar sus estrategias para captar una demanda que se muestra cautelosa ante un entorno económico que, aunque mejora, aún no logra impulsar de forma contundente las ventas en el sector de consumo masivo.